El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha ordenado a una escuela de Llagostera (Gerona) impartir al menos un 25% de las horas lectivas en castellano.
Lo ha hecho al estimar en parte el recurso del padre de un alumno de primero de primaria, y la sentencia, establece que el centro tendrá que impartir en castellano al menos una asignatura troncal además de la específica de lengua.
Con esta sentencia la Sala Contenciosa del TSJC anula el proyecto lingüístico de la escuela porque «no contempla el carácter vehicular del castellano como lengua oficial conjuntamente con el catalán».
El padre llevó el caso a los tribunales con un recurso a una resolución de la Conselleria de Educación en 2019, que denegó su petición el régimen lingüístico del sistema educativo pero sí aceptó que toda la documentación y comunicados de la escuela a la familia del alumno fueran en castellano.
Ahora, el TSJC anula la parte de la resolución que rechazó cambiar el régimen lingüístico en la escuela y los magistrados justifican su en sentencias anteriores que el mismo tribunal ya ha dictado respecto a peticiones similares en otras escuelas de Catalunya.
Según la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), son dos centros concertados de Castelldefels (Barcelona) y Reus (Tarragona) y tres públicos de Els Pallaresos (Tarragona), Abrera (Barcelona) y Barcelona ciudad, que sumarían un total de seis con el centro de Llagostera.
En un comunicado este miércoles, la entidad ha asegurado que desconoce cómo adaptarán esos centros sus proyectos lingüísticos a las decisiones judiciales: «Lo lógico es que reconozcan que tanto catalán como castellano son lenguas vehiculares y garanticen en todos los cursos escolares que se impartan al menos un 25% de materias en castellano o en catalán con independencia de la realidad social del entorno del centro educativo».