Yolanda Díaz se ha convertido en la política mejor valorada de España gracias a su labor al frente del Ministerio de Trabajo. La también vicepresidenta segunda quiere utilizar su popularidad para unir a la izquierda del PSOE a pesar de la tensión que existe entre formaciones como Podemos o Más País.
Es cierto que en Unidas Podemos han cerrado filas en favor de Díaz, respaldada por Pablo Iglesias a pesar de su deseo de pactar con el ‘errejonismo’ o querer esconder las siglas de Podemos en la próxima papeleta electoral.
Suspicacias en algunos sectores de Unidas Podemos
Los principales dirigentes de Unidas Podemos aplauden en público a Yolanda Díaz a pesar de que hay varios sectores en la coalición que miran con recelo la posibilidad de apadrinar un proyecto personalista y posiblemente desideologizado.
Preocupado está con este asunto Juan Carlos Monedero, que en su blog dice que «la crítica a los partidos -por lo común muy merecida-, no debe dejar paso a ‘soluciones’ tipo listas Macron o, como ocurrió en la alcaldía madrileña en el segundo embate de Manuela Carmena (y que ella misma entendió posteriormente como un error), a la sustitución de los partidos por espacios políticos trabados solamente por el carisma y la fuerza política de quien los representa».
Aun así el director del Instituto 25M apoya con vehemencia a Yolanda Díaz, pero esta situación probablemente cambie si esta decide liderar una plataforma de ‘izquierda pop’ que anteponga la fotogenia al programa.
Hay voces también en Izquierda Unida o el Partido Comunista de España que no miran con buenos ojos a la gallega. Especialmente conocida es la incomodidad de Alberto Garzón con su figura por su decisión de que la federación gallega de IU pactase con Podemos en las generales de 2015, en vez de coaligarse con la propia IU.
El ministro de Consumo también lleva grabado a fuego el hecho que Díaz se diese de baja de la coalición en 2019 por la postura de IU en favor de que Unidas Podemos facilitase la investidura de Pedro Sánchez mediante un acuerdo programático en vez de forzar una repetición electoral si el PSOE se negaba a formar Gobierno con ministros morados, tal y como exigió y consiguió Pablo Iglesias.
Sin alternativas de garantías a Yolanda Díaz
En Unidas Podemos creen que su espacio electoral se derrumbaría si Díaz finalmente rechaza el envite de liderar una fuerza de izquierda alternativa en 2023. La coalición podría volver a los guarismos clásicos de Izquierda Unida si no logran un revulsivo en el cartel.
Difícilmente lograría serlo Ione Belarra, escasamente fogueada en debates, entrevistas o mítines. Y tampoco tienen una valoración para tirar cohetes Irene Montero o Alberto Garzón. Quizá la opción menos mala del espacio de Unidas Podemos podría ser la alcaldesa de Barcelona: Ada Colau.
Más País se resiste al pacto con Unidas Podemos
No parece factible que Yolanda Díaz logre agrupar a la izquierda alternativa por la decisión de Íñigo Errejón de que Más País no formalice pactos con Podemos. La pequeña formación sigue focalizada en la Comunidad de Madrid y sus previsiones demoscópicas se han frenado en seco desde que Okdiario.com destapó la presunta agresión de Errejón a un jubilado.
La intención del diputado con Más País es recorrer «un camino verde alejados del ruido, demostrando que es posible hablar de los temas que importan. Trayendo la política de vuelta a la vida cotidiana. Los temas de los que hablamos -salud mental, transporte, conciliación, cambio climático- son claramente los temas del siglo XXI y de la ola verde europea. Por eso han despertado ecos en más sitios de España».