El portavoz del PSOE, Felipe Sicilia, ha evitado este lunes aclarar si los socialistas estarían dispuestos a renunciar al juez de la Audiencia Nacional José Ricardo de Prada para lograr un acuerdo con el PP para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ante el rechazo que genera entre los ‘populares’, y ha apelado a la «prudencia».
En concreto, Sicilia ha asegurado que desde su posición como portavoz del partido, y desde el atril de Ferraz, no iba a «mencionar ni a calificar ni a poner sobre la mesa ningún nombre» que «en un momento dado» pueda suponer «algún tipo de dificultad para el acuerdo».
«El acuerdo está llevándose a cabo por parte del Gobierno y del PP, no sé en qué términos está el acuerdo, si está más avanzado o no. Eso forma parte del proceso de diálogo y de negociación, hay que guardar prudencia respecto a los avances, la misma prudencia respeto a los nombres», ha explicado en rueda de prensa en la sede del PSOE, tras la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal.
Sicilia ha sido preguntado, en concreto, sobre si el PSOE estaría dispuesto a renunciar a proponer al juez de Prada en esa negociación para lograr un acuerdo con el PP; o si, por el contrario, no van a aceptar vetos, tras haber apoyado los socialistas y Unidas Podemos al polémico candidato del PP para el Tribunal Constitucional Enrique Arnaldo, que supuso la ruptura de la disciplina de voto entre sus filas.
Precisamente la negativa del Gobierno a retirar a De Prada de la mesa de negociación fue la razón que hizo saltar por los aires el acuerdo que tenían prácticamente cerrado a principios de este año. Los ‘populares’ rechazan a De Prada por ser el juez al que se le atribuyen las frases más contundentes sobre la ‘caja B’ del PP en la sentencia del caso Gürtel.
La propia portavoz del Gobierno por aquel entonces, la ministra de Hacienda María Jesús Montero, aseguró en marzo, poco después de romperse las negociaciones, que el Ejecutivo no iba a aceptar vetos a personas por «conductas asociadas al ejercicio de las funciones que estos jueces tenían asignados antes de ser propuestos para este órgano».
Sí reconoció, aunque sin mencionar su nombre, que habían aceptado renunciar a la propuesta de la jueza Victoria Rosell, que ahora es miembro del Gobierno como delegada contra la Violencia de Género. El motivo fue precisamente esas «responsabilidades el actual Ejecutivo» o su vinculación «con algunas de las formaciones políticas de forma explícita» –Rosell fue diputada por Unidas Podemos–.
Este lunes, el portavoz del PSOE ha rechazado hablar tanto de nombres como de los perfiles de los candidatos que el PSOE está dispuesto a plantear o retirar de la mesa, y ha defendido que lo que quieren los socialistas es que haya acuerdo, y «pronto».
«Espero que pronto el PP pueda desbloquear esta situación y se puedan hablar de los jueces y magistrados que tengan forman el CGPJ, Más allá de unos nombres y de otros. Estamos en fase de negociaciones, y en una fase en que se negocia no vamos a mencionar ni a calificar ni a poner sobre la mesa ningún nombre desde el PSOE que pueda, y lo digo sobre este atril, que pueda en un momento dado suponer algún tipo de dificultad sobre el acuerdo», ha explicado Silicia.
En todo caso, ha recordado que la negociación con el PP la está llevando a cabo el Gobierno, y ha confesado que no sabía en qué punto se encuentra, o si está más o menos avanzada. Sí ha confinado, eso sí, en que las conversaciones puedan llegar «a buen puerto». «Este Gobierno es capaz de llegar a acuerdos. Quién está enfrente, el PP, no lo está facilitando. Confío en que esa actitud pueda cambiar y podamos tener pronto la renovación», ha ahondado.
A este respecto, ha vuelto a exigir al PP que acabe con el «bloqueo» de la renovación, tras «más de 1.000 días» con mandato caducado, y ha vuelto a rechazar la condición de los ‘populares’ de que el Gobierno se comprometa a estudiar una reforma legal del sistema de elección del CGPJ.
