Los éxitos de Yolanda Díaz encumbran al ‘Iván Redondo’ catalán, Josep Vendrell

Que una ministra con carnet del PCE sea la política mejor valorada de España dice mucho del talante Yolanda Díaz, que al frente del Ministerio de Trabajo se ha ganado a pulso una fama de sosegada, dialogante, eficaz y poco amiga de las performances, los tuits ruidosos y los pulsos públicos a sus compañeros del Consejo de Ministros, tal y como hacía Pablo Iglesias.

La vicepresidenta segunda del Gobierno tumba a Teodoro García Egea a golpe de datos, disfruta de los positivos números del empleo, saca su bagaje sindicalista para negociar sin estridencias con la CEOE, es capaz de lograr que dirigentes de Más Madrid o Compromís le acompañen sobre un escenario, y ha conseguido golpes de efecto como su visita al Papa Francisco.

Parte del mérito de algunos éxitos mediáticos son atribuibles a un equipo liderado por un experimentado jefe de Gabinete que hasta hace unos meses apenas había trabajado en el tablero político estatal.

JOSEP VENDRELL

Josep Vendrell ha desarrollado su carrera política principalmente en Cataluña tras tres décadas de militancia en el PSUC, partido del que fue líder de juventudes; y en Iniciativa per Catalunya, donde se encargó de su Comunicación, fue jefe de Gabinete del conseller de Interior Joan Saura en el primer tripartito catalán, y ejerció como secretario de Relaciones Institucionales de Interior en el segundo tripartito.

Posteriormente ejerció de diputado en el Congreso por En Comú Podem entre 2015 y 2019, regresando entonces a su tierra como coordinador del grupo parlamentario de los comunes en el Parlament de Catalunya.

Vendrell ha apostado por uno de sus antiguos colaboradores para que se encargue del discurso y estrategia de Yolanda Díaz: Rodrigo Amírola, que colaboró con Íñigo Errejón en el nacimiento de Podemos y hasta hace unos meses ejercía como jefe de Gabinete de Albiach. No parece que a Unidas Podemos le haga falta el fichaje de Iván Redondo, que alaba a Díaz y Ayuso para enfadar a su exjefe.

DÍAZ E IGLESIAS

La sobria campaña de los comunes en las últimas elecciones catalanas, en la que En Comú Podem superó todas las previsiones de votos y escaños, prendó a Pablo Iglesias, que comprendió que sus socios catalanes podían repetir con Yolanda Díaz lo que habían logrado con Jessica Albiach.

El fundador de Podemos aconsejó a Díaz el fichaje del jefe de la campaña, Josep Vendrell, que fue ‘cedido’ a la vicepresidenta con la anuencia de su amiga Ada Colau. Y así el catalán se convirtió en el jefe de Gabinete de la líder del espacio Unidas Podemos.

Vendrell, que ocupó el hueco que dejó Julio Rodríguez, ha conseguido reforzar el perfil propio de Díaz, que ha dejado claro que pretende coser un ‘Frente Amplio’ que podría desdibujar a Podemos. Y lo hace con el placet de Iglesias, que en público y privado sigue apoyando a su sustituta a pesar de que dirigentes como Juan Carlos Monedero ha dejado claro su incomodidad ante proyectos basados en carismas en vez de hacerlo en un ideario.

La sintonía de Díaz e Iglesias es excelente desde que se conocieron en las elecciones gallegas de 2012 cuando el segundo fue enviado por Izquierda Unida para realizar asesoría en campaña electoral. En aquella cita la versión gallega de IU se integró en una coalición liderada por el histórico dirigente nacionalista Xosé Manuel Beirás, que logró un estupendo resultado.

Yolanda Díaz antepondría posteriormente su fe en Iglesias sobre IU, ya que la federación gallega de la coalición pactó con Podemos en 2015 para enfado de Alberto Garzón. El hoy ministro de Consumo vio con pesar en 2019 que la dirigente posteriormente rompía el carnet de Izquierda Unida para mostrar su enfado con la postura del propio Garzón, que pidió a Podemos que permitiese un Gobierno del PSOE sin carteras como la que disfruta tras la repetición electoral.