Podemos desahucia a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) en otra lucha interna

La formación morada sigue empeñada en revivir una y otra vez los pequeños cismas internos. Ese mantra de la derecha de que la izquierda nunca está unida parece confirmarse cada día. Ahora, Podemos vive un nuevo choque con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Hasta ahora habían ido de la mano, pero parece que a la PAH no les ha gustado en lo que se ha convertido el partido Yolanda Díaz una vez ha tocado moqueta y ha entrado en el Gobierno. El origen del choque interno ha sido que Podemos se ha bajado y no ha votado a favor de una ley que promovían desde la plataforma para conseguir apuntalar el derecho a una vivienda. Desde la PAH han iniciado una batalla contra los dirigentes de Podemos dado que se sienten directamente traicionados por los morados. El criterio del PSOE se ha impuesto.

La sensación en las bases de Podemos es que poco a poco el partido ha priorizado estar en el Gobierno frente a sus principios. Hasta ahora, nadie se había cuestionado el idilio político entre Podemos y la PAH, pero ahora han dejado entrever el choque interno porque desde la plataforma se sienten traicionados porque Podemos ha retirado su firma del proyecto de ley presentado por los afectados por la hipoteca. Se han dejado ver mensajes muy agresivos de los integrantes de la PAH hacia Podemos. La formación morada de Ione Belarra, de momento, ha guardado silencio pese a los comentarios de sus antiguos socios. Lo que está claro es que este nuevo cisma le ha arrancado algunos votos de cara a las elecciones. Mal negocio si se tienen en cuenta las encuestas electorales.

Lo curioso es que Podemos parece haber cedido a las presiones del PSOE para no quebrar aún más la coalición de Gobierno. Esta propuesta de ley tenía el apoyo en un inicio de Unidas Podemos, y mantiene la firma de Más País, EH Bildu, ERC, Junts Per Catalunya, CUP, Compromís, BNG y Nueva Canarias, vamos, de todos los partidos de izquierdas en bloque y Junts per Catalunya. Sin embargo, Podemos ha decidido retirarse de este proyecto por las presiones de su socio de Gobierno para evitar nuevos roces. El problema es que mientras ha intentado contentar a Pedro Sánchez, Podemos se ha dejado en el camino una buena cantidad de votos procedentes de los afectados por la hipoteca.
La ley incluía consideraciones interesantes y cruciales para los partidos de izquierdas. Entre ellas, se ha buscado directamente regular la dación en pago, prohibir los desahucios sin alternativa habitacional y los cortes de suministro para familias vulnerables, así como extender la regulación de los alquileres catalana al resto del Estado. Había más puntos, pero se han quedado en el tintero. Esta ley no ha llegado a nada (ni lo habría hecho aunque Podemos la hubiera apoyado), pero el gesto de la formación morada ha sido lo suficientemente llamatico como para enfadar en bloque a todos y cada uno de los integrantes de la PAH. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, tampoco se ha pronunciado a pesar de está muy a favor de que esta ley saliera adelante.
Para Podemos es una cuestión de equilibrio de Gobierno porque el partido no quiere enfrentarse con el PSOE en este momento, dado que entienden que es mejor mantenerse a flote y con capacidad de gestión en los próximos años. La PAH lo que entiende es que Unidas Podemos ha traicionado sus principios y no ha comulgado con los principios que le llevaron al poder. Aún así, no parece que vaya a haber muchas consecuencias para el partido de Ione Belarra. Mejor pisar moqueta que defender sus principios.
Vox parece haber convencido a Ione Belarra y a los suyos para que no votaran a favor de la ley de vivienda. «La propuesta de Podemos dinamita el acceso a la vivienda», aseguraban. «Con su ley sólo podrán contratar una hipoteca las familias con posibles», aseguró la diputada del partido de derechas Cristina Esteban. Pues al final no era la ley de Podemos, o si lo era, se bajó del carro. «Vale, pero sigo sin entenderlo. ¿El PSOE les va a dejar sin merienda si la firman? No, en serio, qué consecuencias podría tener para Podemos además de quedar mal con el movimiento de vivienda con el que ha estado haciéndose fotos desde que existe? ¿No pierde demasiado?», se preguntaba una periodista.