La presidenta del Parlament, Laura Borràs, planteó a ERC y CUP una propuesta ante la retirada del escaño de Pau Juvillà que comprometía a los tres grupos independentistas a afirmar en el pleno que se aplicaría la «desobediencia en cualquier futura inhabilitación», según consta en la propuesta.
Según han avanzado el diario Ara y Nació Digital, Borràs propuso a los grupos independentistas este documento, que consta de dos puntos, para votarlo en el pleno de la Cámara, pero fue rechazada y no se llevó a cabo.
«Se mantendrá desobediencia en cualquier futura inhabilitación. Todos los grupos se comprometen a no cubrir eventualmente vacantes por inhabilitación, sin perjuicio del derecho de los diputados de renunciar voluntariamente a su escaño», dice el primer punto del documento.
El segundo punto señala que el Govern «se compromete a obedecer al Parlament incluso en contra de resoluciones judiciales o administrativas».
Tras oficializarse la retirada del escaño de Juvillà, Borràs acusó a ERC, la CUP y al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, de no haber aceptado una propuesta con la que considera que quedaría blindada el acta del diputado ‘cupaire’.