viernes, 13 diciembre 2024

El PP trata de resistir a las encuestas con Ayuso para gobernar en Castilla y León

El Partido Popular trata de resistir en la recta final de las elecciones de Castilla y León. La formación liderada por Pablo Casado comenzó muy bien en las cuestas, que la situaban como clara favorita para hacerse con la victoria en la llamada a las urnas del próximo 13 de febrero, incluso vaticinaban una posible mayoría absoluta de Alfonso Fernández Mañueco. Sin embargo, el grupo de los populares ha sentido en sus propias carnes el peso y desgaste de la campaña electoral y ha visto como poco a poco se le iban escapando los votos y con ellos la ansiada mayoría absoluta. El PP ha ido de más a menos en la campaña castellanoleonesa. Esto se siente entre los integrantes populares, que deberán buscar desesperadamente apoyos para poder gobernar en Castilla y León. Un escaño podría ser decisivo y decantar la balanza hacía la bancada socialista. Por eso, el PP ha sacado la artillería pesada para encarar el tramo final antes de las elecciones y ha llamado a Isabel Díaz Ayuso para intentar levantar la situación.

El pasado 20 diciembre, el presidente de Castilla y León por el Partido Popular, Alfonso Fernández Mañueco, anunció la disolución de las Cortes y la convocatoria de elecciones en la comunidad para el 13 de febrero. Todo ello ante un posible riesgo una moción de censura y para quitarse de encima a su socio de Gobierno, Ciudadanos. Esta fecha se gravó a fuego en la mente todas las formación que comenzaron rápidamente a formar sus listas, con algún que otro movimiento entre partidos. Este fue el caso de Ciudadanos ya que muchos de sus integrantes no tardaron en «poner ojitos» a Mañueco para que les incluyera en sus listas. Y es que, en las arcas del PP siempre hay sitio para los tránsfugas y chaqueteros que, en su mayoría, proceden de la formación naranja, liderada por Inés Arrimadas. Aunque no es de extrañar este movimiento de los políticos de Ciudadanos que vieron como su formación se hundía a pasos agigantados, mientras el grupo de los populares se situaba la favorita a ganar las elecciones.

mañueco quería copiar la estrategia de ayuso en las elecciones madrileñas

Así, el pistoletazo de salida estaba dado y todos trabajaban en una estrategia para conseguir la ansiada victoria en las urnas. Mañueco se veía ganador desde el primer momento, pero su objetivo era mucho más ambicioso. No bastaba con ganar, el presidente de Castilla y León quería conseguir la mayoría absoluta y se puso manos a la obra para conseguirlo. Para ello, tomó a una persona como referente, como ejemplo a seguir, Isabel Díaz Ayuso. Que la presidenta de la Comunidad de Madrid arrasó en las últimas elecciones es un hecho, donde casi consigue la mayoría absoluta. Por ello, Mañueco pretendía imitar a la líder madrileña y emular lo que ella había conseguido en Castilla y León. Una tarea nada fácil, pero no imposible, ya que las primeras encuestas sonreían al candidato popular.

Tanta era la fuerza de Mañueco en la comunidad castellanoleonesa que una encuesta le situaron al borde de la mayoría absoluta con una suma de 38 escaños, frente a los 41 que se necesitan para alcanzar la ansiada gloria y conseguir gobernar en solitaria. Cada vez estaba más cerca de su objetivo. Todo ello gracias a su intención de imitar la campaña y estrategia que Alfonso Serrano, había preparado para la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y que también les había salido. En este punto, a Mañueco todo le parecía posible, iba conseguir lo mismo que Ayuso o, incluso, más, ya que se veía con muchas posibilidades de conseguir la mayoría absoluta. Y ante, esta sensación de victoria, el presidente de Castilla y León se vino arriba y afirmó que repetiría las elecciones si necesitaba a Vox para gobernar. Lo que el no sabía es que a partir de ese momento, la situación iba a dar un gran giro.

Isabel Díaz Ayuso

El PP, tras ese momento de gloria, ha ido cuesta abajo y sin frenos, poco a poco ha ido perdiendo cada vez más votantes. La frenética campaña electoral ha ido desgastando al candidato y al partido de cara a la opinión pública, es decir, de cara a los votantes. Mientras un partido ha ido escalando puestos: Vox. La formación de la que tanto ha renegado Mañueco ha ido creciendo a medida que las votaciones se iban acercando. Así, las últimas elecciones que se han dado a conocer han alejado aún más al presidente de Castilla y León de la mayoría absoluta y le ponen en la difícil tesitura de tener que pedir ayuda a la formación de Santiago Abascal si quiere seguir manteniendo el gobierno de la comunidad.

Solo queda una semana para la llamada a las urnas y las encuesta que ponen en una posición difícil a los populares, ya que cualquier escaño cuenta y, más si puede ser decisivo para decantar la balanza. Ahora se abre la posibilidad de que la diferencia entre PSOE y PP esté solo en un escaño. Por ello, ha pedido ayuda a su gran aliada, la presidenta de madrileña, para intentar remontar la situación en el último momento. Así, Ayuso ha acudido al rescate de Mañueco y ha asistido a un acto, que ha tenido lugar este martes, para echarle un cable a su compañero de partido. Todo ello con un objetivo: ganar las elecciones de Castilla y León. Lo que está claro es que la mayoría absoluta se tiñe de color muy oscuro para el PP, se observa como un imposible. Y es que, ni Alfonso Fernández Mañueco es Isabel Díaz Ayuso, ni Castilla y León es Madrid.