El presidente de Enagás, Antonio Llardén, ha defendido la renovación del consejo de administración de la compañía que se acometerá en la próxima Junta General de accionistas, ya que los nuevos consejeros son perfiles que aportan «un ‘know how’ impresionante».
En rueda de prensa, Llardén recordó que el presidente «no influye ni debe influir» en los nombramientos de los consejeros independientes, cuya propuesta hace la Comisión de Nombramientos y Retribuciones y después deben ser ratificados por los accionistas en la Junta General.
En el caso concreto de Maite Costa, expresidenta de la antigua Comisión Nacional de la Energía (CNE) y exdiputada por el PSOE, propuesta como consejera independiente y que actualmente es consejera dominical en Red Eléctrica de España (REE), señaló que la Ley de Sociedades de Capital «deja perfectamente claro que no estando en dos consejos al mismo tiempo una persona con su currículum puede ser consejera de Enagás».
MAITE COSTA DEJARÁ EL CONSEJO DE REE ANTES DE ENTRAR EN ENAGÁS.
De esta manera, Llardén abrió la puerta a que, para que el nombramiento sea compatible, Costa abandone el sillón en el órgano rector del operador del sistema eléctrico que ocupa actualmente antes de la celebración de la Junta General de accionistas de Enagás, prevista para finales de marzo. «Ella tomará las medidas a tomar y hay 30 o más días para que esto funcione», añadió.
Enagás, participada en un 5% por el holding público SEPI, someterá a sus accionistas en la Junta General el nombramiento como consejeros independientes, junto al de Maite Costa, de Manuel Gabriel González Ramos, exdelegado del Gobierno de Castilla-La Mancha; David Sandalow y Clara García Fernández Muro, ambos procedentes del mundo académico como profesores en la Universidad de Columbia (Nueva York, EE UU) y de la Universidad Complutense de Madrid, respectivamente.
Los nuevos consejeros sustituirán a Ignacio Grangel, Antonio Hernández-Mancha, Isabel Tocino y Gonzalo Solana, exaltos cargos en diferentes Gobiernos ligados al PP, a los que les vencía el mandato este año.
Mientras, Ana Palacio, ministra de Exteriores con el Gobierno del PP de José María Aznar, permanecerá en su cargo como consejera independiente.
«Se ha hecho una renovación de consejo, con todas las lecturas posibles que se quieran hacer, en la que incorporamos perfiles que ayuden al proceso de gobernanza de una compañía cotizada con un 90% de inversores internacionales y una actividad en un sector como el energético, que es muy regulada», dijo.
En el caso de Sandalow, Llardén destacó que se incorpora a una persona «con profunda experiencia en los temas internacionales de Energía, que estuvo en el Gobierno de Obama, y que nos puede aportar mucha experiencia en el mundo internacional y en Estados Unidos, donde tenemos una amplia experiencia».
GONZALO AIZPIRI PUEDE «APORTAR MUCHO» A ENAGÁS.
En lo que se refiere al nombramiento del nuevo consejero delegado de la compañía, Arturo Gonzalo Aizpiri, que asumirá además las funciones ejecutivas del grupo, Llardén indicó que se trata de «una persona que puede aportar mucho» a Enagás, dado su «conocimiento y experiencia en el sector».
«Aporta también un conocimiento de las instituciones y de la regulación en un momento en el que en toda Europa el sector energético va a tener una profunda transformación derivada del proceso de descarbonización», añadió Llardén.
Por su parte, Gonzalo Aizpiri, en su primer acto como consejero delegado de Enagás, reconoció que supone «una enorme alegría» sumarse a la energética, una compañía «que está jugando y está llamada a jugar un papel más trascendental en la forma en que España afronta la transición energética».