sábado, 14 diciembre 2024

Vox afirma que está «en su ADN proteger a las mujeres»

El candidato de Vox a la presidencia de la Junta, Juan García-Gallardo, ha afirmado que está «en el Adn» del partido «proteger a las mujeres» pero «de una manera muy diferente a lo que ha hecho el PSOE», ha matizado, ya que a su juicio, los socialistas han «propiciado una inmigración irregular que lo que ha hecho es que las mujeres tengan algunas amenazas adicionales a las que ya tenían antes».

«Es evidente que hay una inmigración con una capacidad de adaptación limitada a nuestra sociedad, una sociedad plural que respeta los derechos de los homosexuales y de las mujeres y que en muchas ocasiones, con un lugar de procedencia muy determinado tienen un protagonismo porcentual mayor en las agresiones a mujeres», ha incidido, a lo que ha agregado que «la población del norte de África ha protagonizado, en un porcentaje mayor, agresiones en manada a mujeres», algo que Vox pretende evitar.

«Nosotros proponemos una igualdad ante la ley para que todas las víctimas de violencia intrafamiliar tengan la misma cobertura, protección y acceso a ayudas sociales», ha aseverado tras mantener una reunión con el presidente en funciones de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en el marco de la ronda de contactos del PP para lograr un posible pacto de investidura.

Tras esta reunión, García-Gallardo ha reconocido salir con la «impresión» de que peticiones como la derogación de ley de violencia de género o de la memoria histórica le han parecido «razonables» al PP –algo que, por su parte, Mañueco ha negado haber discutido–. Se trata, según ha detallado el candidato de Vox, de sus reivindicaciones para eliminar la «normativa de izquierda».

En esta misma línea, ha acusado que a nivel presupuestario y de normativa en la Junta de Castilla y León «se han establecido cuotas, se ha dado importancia al lenguaje inclusivo o se ha permitido que haya activistas en los colegios manipulando a los niños».

Mientras, respecto a la memoria histórica, ha asegurado que su objetivo es que «no haya un relato histórico fragmentario para evitar que haya abuelos buenos y abuelos malos».