Los platos de albóndigas que superan (o casi) a las de tu madre

Las albóndigas son uno de los platos más tradicionales de la gastronomía española. Desde unas con colmenillas en Candela Restaurante a las de rape de Nuevo Genaro. Para que no tengas que romperte la cabeza, te traemos una selección donde comer las mejores albóndigas de la capital.

  • Las albóndigas son uno de los platos más tradicionales de la gastronomía española. Desde unas con colmenillas en Candela Restaurante a las de rape de Nuevo Genaro.
  • Para que no tengas que romperte la cabeza, te traemos una selección donde comer las mejores albóndigas de la capital.

Son uno de los platos más clásicos de la gastronomía española. Pocos son los que se resisten a ellas y menos lo que pueden evitar mojar pan en su deliciosa salsa. Sí, hablamos de las albóndigas, ese manjar que te traslada a tu infancia y al aroma de las que preparaba tu abuela. Sabemos que es imposible igualar el sabor de las que cocinaba la matriarca de tu familia, pero aquí te traemos los mejores lugares en los que degustar algunas… ¡impresionantes!

Candela Restaurante

Albóndigas con colmenillas
Candela Restaurante

Situado en la calle Uruguay 1, en pleno barrio de Chamartín, Candela Restaurante se ha consolidado como uno de los restaurantes de referencia en la capital. Los amantes de la buena gastronomía aquí el sitio ideal para relajarse y picar algo como una ensaladilla rusa, sus patatas bravas con salsa kimchy o uno de sus platos estrella: las albóndigas en salsa de colmenillas.

Candela Restaurante cuenta con dos ambientes diferenciados. En la planta superior o planta calle se encuentra la zona de barra, con mesas altas y pantallas para ver el fútbol. Aquí funciona, en horario ininterrumpido, una carta de formato más informal que permite disfrutar de un tapeo de calidad en buena compañía. La terraza en la parte exterior es idónea para tomar una caña, ahora con estufas para combatir el frío del invierno.

Para los amantes de la coctelería, Candela Restaurante no defrauda. Se pueden encontrar desde lo más clásicos a otros más innovadores, como el mojito de melón, que te hacen recordar, casi sin querer, los míticos chicles que muchos devoraban a la salida del colegio. Además, su personal, solícito y siempre dispuesto a generar una experiencia única, es capaz de crear, en el momento, nuevas combinaciones ajustadas a los gustos personales de cada cliente.