La invasión de Ucrania agita el fantasma de la crisis de Gobierno sobre Podemos

La invasión de las tropas rusas sobre Ucrania ha avivado aún más el fantasma de la crisis de Gobierno sobre Podemos. Las diferencias de opiniones entre los dos grupos políticos que forman el Ejecutivo, Unidas Podemos y PSOE, se ha ido agrandado con las posiciones y decisiones del presidente de España, Pedro Sánchez. Y ahora, con la guerra entre Ucrania y Rusia, han vuelto a resurgir el fantasma de la crisis de Gobierno que ronda sobre Unidas Podemos. La formación morada, liderada por Ione Belarra, no ha dejado de contradecir las decisiones tomadas por Pedro Sánchez desde que comenzó el conflicto. La última ha sido después de que el presidente rectificara e informara de que España enviará armas a Ucrania. Una iniciativa que no ha sentado nada bien al ala morada del Gobierno y han asegurado que «una escalada bélica no va a resolver el conflicto». Una discrepancia que revive el fantasma de la crisis del gobierno de coalición y que pone a Unidas Podemos en el punto de mira de Sánchez.

Las discrepancias en las dos formaciones que componen el Ejecutivo ha estado presente en ciertos momentos de la legislatura. Sin embargo, desde que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, trasladó a sus tropas a la frontera de Ucrania, las diferencias entre socialistas y podemitas no han dejado aumentar. Una cuestión que se ha intensificado tras la invasión rusa del territorio ucraniano, ya que ha obligado a los países europeos y a todos los que pertenecen a la OTAN a tomar medidas. Así, los dirigentes de estos países se han unido para atacar un enemigo común: Vladimir Putin.

Una de las primeras medidas de España en el conflicto fue enviar la fragata Blas de Lezo al mar Negro para sumarse a la defensa que la OTAN y reforzar la presencia militar en Ucrania. Desde la formación que dirige Ione Belarra emitieron un comunicado rechazando esta iniciativa, así cómo el aumento de los movimientos de tropas y el envío de buques y cazas a la zona. Empezaba así la primera de muchas de las diferencias que iban a poner en evidencia la tensión y crisis en el seno de Gobierno. La siguiente de las discrepancias fue cuando Podemos criticó a la OTAN y a la Unión Europea por el envío de armas al país ucraniano. Ahora, no ha dudado en posicionarse contra la decisión de Pedro Sánchez de sumarse a las países vecinos y a los planes de la Alianza Atlántica, y mandar armamento a Ucrania como compromiso con la OTAN.

Por parte de los morados, esta cuestión ha sido criticada rápidamente por Ione Belarra, quien ha afirmado que «contribuir a la escalada bélica no va a resolver antes el conflicto y nos puede llevar a un escenario muy peligroso. Hemos echado en falta evidencias a las vías diplomáticas«. Una vez más, criticando las decisiones de su propio Gobierno para tratar de paliar la situación en Ucrania y frenar el avance ruso, cuyas tropas no han dejado de bombardear e invadir el país. El ejercito dirigido por Putin ha atacado las grandes ciudades ucranianas y una de las últimas ha sido Kiev, la capital de país, y Járkov, que es la segunda región más grande de Ucrania.

Este anuncio ha tenido lugar durante su comparecencia en el Congreso de los Diputado, donde también ha informado de que pretende aumentar el presupuesto en Defensa. Así, el Sánchez pretende incrementar la partida que recibe Ministerio dirigido por Margarita Robles, que, previsiblemente, alcanzará el 1,22% del PIB cuando acabe la legislatura. Desde la bancada popular, Cuca Gamarra, portavoz del PP, han pedido que esta cifra se sitúe en el 2% y han pedido que este aumento deje de verse «como un gasto cuando es una inversión en seguridad y libertad«, y ha defendido que es necesario «reforzar todas nuestras capacidades militares«.

Sánchez ha anunciado que el prespuesto de defensa alcanzará el 1,22% cuando acabe la legislatura

Y es que, la decisión de aumentar el presupuesto en Defensa ha reabierto el problema militar de España, ya que existe un nivel muy bajo en este área. Esta cuestión lleva años pasando factura a España y a su imagen y relación con terceros países y organizaciones europeas e internacionales. El bajo perfil militar que existe en el departamento de Defensa, liderado por Margarita Robles, ha provocado ciertos países no tengan en cuenta a España en sus planes. Como EEUU, que el pasado lunes mantuvo una conversación con sus socios y aliados para consolidar su postura de apoyo financiero y humanitario a Ucrania ante la invasión rusa, a la que no fue invitado el Pedro Sánchez. Esto se que debe a España tiene poco o nada que aportar a nivel militar, dado el bajo nivel que existe en Defensa en España.

Biden y Sánchez

A esto se suma que Pedro Sánchez tiene un socio de Gobierno que despierta la desconfianza de muchos dirigentes internacionales. El presidente estadounidense, Joe Biden, se fía poco de España y, en este asunto, la formación moderada tiene mucho que ver. Que el partido que dirige Ione Belarra tenga amigos en Venezuela es un tema que no gusta nada al líder de EEUU. La presencia de Podemos en el Consejo de Ministros y sus lazos con países de América Latina enturbian y dificultan considerablemente la relación de Biden con Sánchez. Muchos de los políticos de la formación morada han trabajado activamente con el régimen de Venezuela, quienes también han defendido los intereses de Cuba a la par que criticaban la política «imperialista» americana. Todo un despropósito para la imagen de España y para que sea tenido en cuenta por ciertos organismos. Las críticas de la formación a la OTAN tampoco ayudan a reforzar el posicionamiento de España en la Alianza Atlántica. Y es que, Podemos es todo un agente desestabilizador para establecer estrategia geopolítica y para Sánchez.

Podemos es un socio de Gobierno que resta para Sánchez, que no ayuda, que ejerce «oposición» interna, que critica ciertas decisiones y medidas. Además, supone un obstáculo para España en su relación con otros países y su inclusión en determinados organismos. Estas cuestiones van sumando e incrementando la tensión en el seno del Ejecutivo y la invasión rusa en Ucrania ha reavivado el fantasma de la crisis de Gobierno, el problema que supone compartir La Moncloa con Podemos. Así, la guerra en Ucrania ha vuelto a poner la formación morada en el punto de mira de Pedro Sánchez.