«Hacemos ecología» a tiros: los cazadores imitan a Hazte Oír con un surrealista autobús

El sector cinegético ha lanzado la campaña ’Sí a la vida. Sí a la caza’, durante la que un autobús con esta contradictoria consigna recorrerá las calles de Madrid. Un proyecto que parece inspirado en los polémicos autouses de Hazte Oír, y que sin duda también levantará ampollas. Detrás de esta propuesta se encuentra la Real Federación Española de Caza (RFEC) y el objetivo es defender la importancia de la actividad cinegética como sustento económico de muchas familias, y como sistema imprescindible para el ecosistema, las especies en peligro de extinción y los Parques Nacionales del país. Según la RFEC los cazadores son los verdaderos ecologistas, porque ellos hacen ecología y no se limitan a hablar de ella como los colectivos animalistas y ecologistas.

Manuel Gallardo, presidente de la RFEC, ha sido el encargado de presentar la campaña en la plaza de Toros de las Ventas de Madrid. Aprovechaba su intervención para denunciar las presiones que están recibiendo los cazadores, cuya imagen pública sufre un fuerte desprestigio social. Gallardo hablaba de cierta presión del “lobby animalista”, y de una criminalización “sin precedentes”. Asegura que algunas empresas prefieren evitar relacionarse con el sector, por el rechazo que esta asociación podría generar en la opinión pública, aunque él ha preferido llamarlo «miedo a las represalias».

El autobús comenzará a circular por las calles de Madrid el próximo domingo 20 de marzo, día en el que se ha convocado una manifestación en la que los cazadores quieren pedir al Gobierno que acabe con su «ataque a la línea de flotación de la actividad cinegética». Curiosamente, la actividad cinegética fue la primera que el Gobierno permitió retomar después del confinamiento por la pandemia de coronavirus. Por otra parte, según los últimos datos disponibles del Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, de las 50.510.210 hectáreas que conforman el territorio nacional, un total de 43.945.027 están destinadas a la caza, es decir el 87% del terreno total.

Sin embargo el sector de la caza asegura siente que esta forma de vida está amenazada, y con actos como la campaña ‘Sí a la vida. Sí a la caza’, buscan generar un debate sobre la importancia de una actividad que mantiene alrededor de 200.000 empleos, y aporta 6.475 millones de euros al PIB cada año.

El autobús recorrerá las calles de la capital durante tres días, y realizará paradas en las instituciones más importantes de la ciudad, donde se hará entrega de un manifiesto donde se detalla la situación actual del colectivo, y los ataques estaría recibiendo por parte del Gobierno.

ESTRATEGIA NACIONAL DE GESTION CINEGÉTICA

Mientras tanto, este lunes, el Gobierno y las Comunidades Autónomas aprobaban por unanimidad la Estrategia Nacional de Gestión Cinegética, centrada en una caza sostenible que integre las demandas sociales y medioambientales de dicha actividad. Se incluyen cinco objetivos como un modelo de caza sostenible, que se integre en el desarrollo rural, que esté en equilibrio con otros servicios, usos y aprovechamiento del medio. Además, se pretende poner en marcha sistema de información y monitorización de la caza, además de implementar directrices para gestionar la actividad hacia un ejercicio ordenado, a través de buenas prácticas y la formación de los cazadores.

Los grupos ecologistas y animalistas denuncian que, precisamente, la caza es una actividad que está provocando graves desequilibrios en la diversidad de nuestros bosques. Justo lo contrario que defiende el propio sector. Las granjas cinegéticas son una parte responsable de esta situación. En España existen 285 granjas de especies cinegéticas de caza mayor y 517 granjas de especies de caza menor, según los últimos datos del Registro de Explotaciones Ganaderas del MAPA. Los animales criados en estas instalaciones se sueltan en los cotos de caza, y esto provoca problemas medioambientales, como desplazamientos de especies, daños en la flora, y superpoblación de determinados grupos.