Tu colchón es parte esencial de tu vida cotidiana por lo que hay que tomarse el tiempo suficiente en seleccionar el más adecuado para que disfrutes de un sueño de calidad. Puede ser tentador pensar que, al comprar un colchón, este formará parte de tu vida para siempre, pero, desafortunadamente, no importa lo bueno que pueda ser tu colchón, ya que su vida útil tiene un fin.
Los mejores colchones del mercado, como el colchón magnum Relax, pueden durar de 10 a 15 años antes de que finalmente sucumba al desgaste de sostener su cuerpo todas las noches. En ese momento, deja de brindarte el apoyo adecuado, lo que provoca molestias, dolores y un sueño menos reparador, por lo que aparece la necesidad de encontrar un sustituto.
Factores que indican que debes cambiar de colchón
Los profesionales de Colchones Aznar recomiendan cambiar el colchón cada 8 años; sin embargo, el momento ideal depende de cómo te sientas a la hora de dormir. Los colchones pueden durar más o menos según el material del que estén hechos y el uso que se les haya dado. Los de alta calidad pueden durar hasta 10 años si se cuidan bien.
Aunque este es el plazo recomendado, hay casos en los que otras circunstancias fuerzan que la compra se haga antes y posiblemente debas invertir en un nuevo colchón antes de lo previsto, por ejemplo, si:
- No se ha llevado a cabo un correcto mantenimiento o huele mal.
- Tienes problemas a la hora de dormir.
- Estornudas mucho mientras estás en la cama (probablemente causado por el polvo o los alérgenos).
- Hace mucho ruido cuando te mueves.
- Tienes dolor de espalda o de cuello.
- Algunas zonas se han hundido
- Necesitas una cama de otro tamaño.
Si tu colchón se hunde o si puedes sentir los muelles en la superficie, definitivamente es hora de cambiarlo. Lo mismo ocurre con un colchón ruidoso que suena durante toda la noche cuando te mueves. Revisa tu colchón de vez en cuando para comprobar en qué estado se encuentra.
¿Tu colchón tiene más de 8 años?
Este es uno de los factores decisivos a la hora de cambiar un colchón. Todos los profesionales de la industria de los colchones recomiendan que los colchones se reemplacen cada ocho años, porque para entonces habrá perdido gran parte de su comodidad y soporte. La verdad es que la vida útil de un colchón varía enormemente, lo que depende de cómo lo cuides, cómo duermas sobre él y con qué frecuencia lo gires.
Si ha llegado la hora de cambiar tu colchón, en las tiendas de colchones Aznar puedes encontrar una amplia oferta de colchones de la mejor calidad. En la experiencia de los clientes de este comercio destacan las opiniones Colchones Relax de visco, espuma, látex, muelles, etc. El objetivo principal de este tipo de colchones es ofrecer el mejor descanso al mejor precio, con lo último en tecnología para disfrutar de un sueño reparador.
Problemas de higiene
Aparte de los problemas de rendimiento, los colchones también se convierten en un semillero para que las bacterias se reproduzcan y prosperen. Investigaciones previas realizadas en colchones usados durante ocho años continuos han descubierto la existencia de moho y bacterias. La mayoría de las personas sudan mientras duermen, y el sudor traspasa las sábanas de la cama. Normalmente, nos enfocamos en limpiar las sábanas y las almohadas, pero el colchón se sigue siendo una superficie propicia para el crecimiento bacteriano que presenta riesgos para la salud.
A lo largo de los años, las bacterias y las esporas de moho se acumulan sin que nos demos cuenta porque son invisibles, además pueden inhalarse y provocar enfermedades. Las personas propensas a alergias o problemas respiratorios y de la piel corren más riesgo en este caso. Por lo tanto, cuando el colchón ha servido durante más de 8 años, por regla general, debe reemplazarse.
Dolor al despertar
El sueño es un estado o periodo que sirve para que el cuerpo se recupere del estrés que experimentó durante el día, ya sea por un intenso entrenamiento en el gimnasio o por estar mucho tiempo sentado en el escritorio. Si te despiertas con más dolores y molestias que cuando te acostaste, es probable que tu colchón sea el culpable.
Debido a la degradación gradual y al ablandamiento de los materiales, pierde su capacidad de brindar un soporte de calidad para ciertas zonas del cuerpo como el cuello, la parte baja de la espalda y las caderas. Además, a medida que la amortiguación se desgasta, puede crear puntos de presión dolorosos. Cuando tu espalda se hunde y los muelles rozan con tus caderas, es inevitable despertarse con dolores y molestias.
Si te despiertas sintiéndote cansado o con dolor en ciertas partes del cuerpo, lo más recomendable es cambiar el colchón por otro que brinde un sueño reparador y que esté fabricado con materiales de calidad.