La delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, ha anunciado este miércoles la llegada de un refuerzo policial ante la inminente reapertura de la frontera de la ciudad española con Marruecos, cerrada de hace 26 meses, con el inicio de la crisis del coronavirus.
En declaraciones al canal público Televisión Melilla recogidas por Europa Press, Sabrina Moh ha destacado que la llegada de más agentes de la Policía Nacional forma parte del «el compromiso del Ministerio de Interior siempre mantiene con Melilla». Así ha recordado que, cuando Melilla vivió episodios de presión migratoria en el perímetro fronterizo, «la respuesta de Interior ha sido inmediata». «Los recursos están garantizados cada vez que en Melilla hay alguna situación que lo requiera y, por lo tanto, se movilizan esos efectivos de manera rápida para que, en pocas horas, puedan estar en Melilla prestando servicio», ha aseverado.
La delegada ha admitido que aún no se ha concretado una fecha para su reapertura, aunque el Gobierno de Melilla hable ya del mes de mayo para la recuperación del tránsito de personas y vehículos interrumpido el 13 de marzo de 2020, pero ha querido insistir en que «será gradual» y que «se está trabajando para que en la primera fase pasen los trabajadores transfronterizos con su documentación en vigor, así como las personas documentadas y que cumplan con los requisitos para la entrada a un territorio de la Unión Europea».
Asimismo, ha reconocido que la Operación Paso del Estrecho (OPE) «siempre ha estado encima de la mesa», aunque, lógicamente, siempre vinculada a la reapertura de la frontera entre España y Marruecos de Melilla. «Desde el Gobierno, en los planes iniciales de la OPE, se está trabajando de manera conjunta todo el territorio, incluyendo Ceuta y Melilla y nosotros estamos teniendo en cuenta la posibilidad de que haya OPE por Melilla y, por tanto, tengamos que tener la frontera acondicionada y se están realizando trabajos previos», ha informado.
Sabrina Moh ha manifestado que otro de los elementos que está dentro del paquete de negociaciones es la Aduana Comercial, cerrada unilateralmente por Marruecos el 1 de agosto de 2018. «Antes del cierre de frontera se establecieron unos grupos de trabajo bilaterales para poder poner sobre la mesa cuestiones que le preocuparan a cada país sobre la Aduana Comercial», ha rememorado. Con el cierre total de la frontera de marzo de 2020, «estas reuniones carecieron de sentido, pero ese trabajo previo ha servido de base para el que se está realizando en este momento», ha apuntado.
CÁMARAS DE RECONOCIMIENTO FACIAL
Sabrina Moh también ha resaltado que las obras que se van a cometer en el paso fronterizo de Beni-Enzar para su modernización e implementación de cámaras biométricas que van a permitir controlar no solo la entrada en la ciudad sino también la salida: «Va a suponer tener una frontera acorde al siglo XXI para que sea segura y fluida para los ciudadanos que transitan pero también para que los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FyCSE) puedan trabajar en condiciones óptimas y con sistemas que les faciliten el trabajo en su día a día» ha aseverado.
La máxima responsable del Gobierno de la Nación en la ciudad ha explicado que, aunque en un primer momento se implantaron las cámaras de reconocimiento facial, el cierre de frontera y el consiguiente análisis de toda la situación, llevaron a plantear al Ejecutivo de Pedro Sánchez un sistema mejor que permitiera no solo implementar controles de entrada sino poner en marcha controles de salida para poder conocer cuántas personas entran en Melilla, quiénes han salido y quiénes permanecen en la ciudad.
«Eso requiere de una infraestructura pero también de una parte política, porque tiene que estar la voluntad de apostar por este sistema y establecer la dotación presupuestaria», ha apuntado. Con respecto a la parte técnica, la delegada ha informado de que los equipos se han reunido en numerosas ocasiones para diseñar toda la infraestructura necesaria. «Eso conlleva un trabajo complejo porque se tiene que ver y estudiar muchísimas cuestiones previas a la redacción de los pliegos y posterior licitación y puesta en marcha de la obra», ha explicado.
Sin embargo, ha dejado claro que va a suponer tener una frontera acorde a las europeas y con un sistema novedoso y eficaz de control. Y, aunque no ha querido especificar fechas, ha avanzado que el Gobierno ya trabaja para poner en marcha las obras a la mayor brevedad posible.