F-18, misiles, policías, perros… todo listo para la cumbre de la OTAN

Estos días el Gobierno ultima la preparación  del macro despliegue de seguridad para acoger la cumbre de la OTAN, una minuciosa operación que demuestra la capacidad española para proteger el evento, solo puesta en duda por la mediática/política confirmación del espionaje con el sistema Pegasus a los teléfonos del presidente de Gobierno y la ministra de Defensa.

La cumbre de la OTAN, que tendrá lugar entre el 29 y 30 de junio en Madrid, es uno de los más importantes eventos que ha celebrado España en los últimos años, y una auténtica prueba de fuego  para los magníficos profesionales españoles en el campo de la seguridad y la defensa. Además el momento es decisivo ya que, a las tradicionales amenazas del terrorismo islámico y los movimientos antisistema que cuentan con la simpatía de una parte del mismo Gobierno, se añade la tensión por la guerra de Ucrania, que no tiene visos de terminar pronto.

Ante dichas amenazas el Gobierno de España pondrá en marcha un minucioso dispositivo, en el que destaca la inteligencia que suministrará el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) con el apoyo de los aliados de la OTAN, y la acción de la Policía Nacional/Guardia Civil, junto con la protección sobre todo del espacio aéreo que darán las Fuerzas Armadas (FAS). 

La idea es crear una serie de cinturones y en el caso del espacio aéreo de burbujas de defensa. Así el Ejército del Aire y el Mando de Artillería Antiaérea (MAAA) del Ejército de Tierra (ET) ya estarían ultimando un dispositivo de defensa ante aeronaves, convencionales o sistemas remotamente manejados (los popularmente conocidos como drones), similar a los puestos en marcha en eventos como la coronación de Felipe VI en 2014 o la visita de Obama a España en 2019. Un punto clave será la base aérea de Torrejón (Madrid), donde llegarán las delegaciones participantes a bordo de aviones VIP, entre los que se habrá de distinguir el “Air Force One” del presidente de los Estados Unidos Joe Biden. La responsabilidad de la seguridad de estas aeronaves desde que entren en el espacio aéreo español es del Mando Operativo Aeroespacial(MOA), que de facto es el Mando Aéreo de Combate (MACOM) del Ejército del Aire, siendo la punta de lanza los cazabombarderos Eurofighter y EF-18M, como los basados en Torrejón. Este Mando, bajo las órdenes directas del Jefe del Estado Mayor de la Defensa, contará con una Unidad de Defensa Antiaérea (UDAA) del MAAA que, con sus sistemas de misiles y cañones, establecerán una última burbuja antiaérea. Igualmente la OTAN dará apoyo  en el imprescindible campo del Mando y Control mediante un aparato Boeing E-3A Sentry de la OTAN, los conocidos como Airborne Early Warning and Control System (AWACS), procedente de la base de Geilenkirchen (Alemania). 

10 IMG 9759 Moncloa
AWACS de la OTAN

Respecto al dispositivo terrestre entre la citada base y la ciudad de Madrid, sobre todo en torno al Ifema, que es donde tendrá lugar el evento, se desplegarán  cerca de 30.000 agentes, tanto de las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado (FCSE) como de la Policía Municipal de Madrid.

En lo que respecta a la Policía Nacional, concentrará en la capital de España la totalidad de sus Unidades de Intervención Policial (UIP), tanto para controlar/sellar accesos como para hacer frente a los militantes en movimientos antisistema, tanto españoles como de extranjeros que acudirán para intentar boicotear la cumbre,  que en muchas ocasiones se tornan violentos.  

Respecto a los tiempos, semanas antes se comenzará la labor de inteligencia por parte del CNI, y las FCSE, que además de recabar información general, se centrará en la revisión de las redes sociales para obtener información de los elementos antisistema, además de activar a los infiltrados en dichas organizaciones, sobre todo del ámbito de la ultraizquierda. En esta fase no ayuda nada la polémica sobre el espionaje con el sistema Pegasus, potenciada y “cocinada” desde el separatismo y azuzada por Podemos. Aunque sobre todo hace peligrar la confianza en la seguridad, la operación mediática/política del mismo Gobierno de España, desvelando el espionaje de los móviles del presidente Sánchez y la ministra Robles, confirma  una debilidad no admitida en otros países, al contrario de cuando se filtró que el presidente francés Macron había sido también espiado. Igualmente el cese que pide Podemos y los separatistas de  Robles y la actual  responsable del CNI, Paz Esteban López, serían un duro golpe para la confianza internacional puesta en España.

Una vez en marcha la cumbre, será vital la seguridad de los asentamientos de cada una de las delegaciones, que aparte de sus embajadas podrían utilizar hoteles, y los desplazamientos desde estos inmuebles al Ifema y a la base de Torrejón. Aunque por ejemplo Estados Unidos tendrá montado su propio dispositivo y reforzará la seguridad de su Embajada con más efectivos de los Marines, no todas las delegaciones tienen esta capacidad.

La seguridad se reforzará con las unidades especiales de los FCSE, como son el Grupo Especial Operativo (GEO) de la Policía Nacional o la Unidad de Intervención Especial (UEI) de la Guardia Civil, que tienen sede en Guadalajara y Valdemoro (Madrid) respectivamente. Así como en otros eventos, los equipos de tiradores de elite del GEO dominarán las alturas estratégicas de la capital y con ayuda de los helicópteros vigilarán una posible acción terrorista mediante francotiradores. Además los equipos de perros especializados en detección de explosivos patrullarán las zonas sensibles, e incluso los equipos de subsuelo vigilarán las alcantarillas para evitar su uso por elementos no autorizados.

IMG 8337 Moncloa
Miembros del GEO entrenándose en su base de Guadalajara

El Centro Criptológico Nacional, que depende del CNI, y el resto de los organismos estatales que tienen este rol, como el Mando Conjunto del Ciberespacio (MCCE) de las Fuerzas Armadas, asegurarán la protección de las comunicaciones de las delegaciones asistentes a la cumbre.