Las altas temperaturas del verano y las sucesivas olas de calor intenso, incrementan el riesgo de sufrir un golpe de calor. Todos somos vulnerables a padecerlo y es relativamente fácil que nos pille por sorpresa si estamos expuestos al calor exterior durante estas jornadas complicadas. Por eso es importante saber identificar los síntomas cuanto antes, y actuar para prevenirlo. También es fundamental saber como actuar cuando ocurre, ya que es un trastorno que requiere tratamiento inmediato.
6CÓMO ACTUAR ANTE UN GOLPE DE CALOR

Si el golpe de calor se ha producido, lo primero es colocarse en un lugar fresco, sombreado y ventilado, y bajar la temperatura del cuerpo. Esto se debe hacer poco a poco, ya que un cambio brusco puede ser contraproducente. Lo recomendable es aplicar compresas o toallas de agua fría en la cara, el cuello, la cabeza, el pecho y la nuca, e ir enfriándolas a medida que se calientan. Además, hay que recuperar la hidratación del cuerpo con agua fresca, bebidas isotónicas o sueros de rehidratación. Si la persona afectada no está consciente, hay que avisar al 112 de forma inmediata.