La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), en el último tiempo, ha efectuado un estudio del etiquetado de 113 muestras de tomate de bote. Para realizarlo, crearon tres categorías diferentes: tomate triturado (el más parecido al natural, pero con sal y ácido cítrico); tomate frito (aceite, azúcar, sal y el mismo conservante); y salsa de tomate parecido al anterior mencionado, pero con más ingredientes. La organización ha analizado las etiquetas de diferentes botes y marcas y de tomate y ha lanzado una advertencia.
9Otro estudio sobre el tomate frito de bote
Dejando de lado el estudio de la OCU sobre los factores que determinan la calidad del tomate frito de bote, investigadores de la Universitat Politécnica de Valencia, pertenecientes al Instituto de Ingeniería de Alimentos para el Desarrollo y Centro Avanzado en Microbiología de Alimentos, realizaron su propia investigación. “Hemos evaluado la viabilidad de la cepa probiótica a lo largo del proceso digestivo de forma individual y la presencia de antioxidantes procedentes de una fuente vegetal, así como el impacto de la cepa probiótica sobre los cambios experimentados por los compuestos antioxidantes y bioaccesibilidad final”, afirmaron.
