El presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, ha arrasado en las elecciones autonómicas y ha conseguido apuntalar su proyección. El líder del PP de Andalucía ha conseguido un resultado histórico para el Partido Popular y ha conseguido, además de revalidar su puesto al frente de la Junta, consolidar su figura en su formación. Ha sacado mayoría absoluta, por lo que no tendrá problemas para gobernar. Juan Manuel Moreno Bonilla ha convencido a los andaluces y ha lanzado un mensaje al resto de España que entusiasme en el Partido Popular: el cambio de ciclo está cerca. Moreno Bonilla ha obtenido 57 escaños, y la mayoría absoluta está en 55.
Superar el umbral de los 50 diputados era algo que solo se veía en los mejores escenarios imaginados por Génova. Y obtener mayoría absoluta es algo que supera toda expectativa. Juan Manuel Moreno Bonilla ha dado un golpe de la mesa que no solo le ha valido quedarse en San Telmo durante cuatro años más. Moreno Bonilla ha conseguido establecer los mimbres para el que será su futuro político: liderar el Partido Popular para hacerse con el control de la Moncloa. Algo que no niega nadie de su entorno y algo que en Génova se comenta con mucha fuerza cada vez que se pregunta.
Vox se ha dado el batacazo y se quedará absolutamente fuera del juego de gobierno. Ellos aseguraban durante el recuento que harían valer sus escaños con todo para conseguir rascar lo que fuera. Pero ahora ni eso dado que Vox se ha quedado fuera de todo y ha bajado prácticamente en todos los territorios donde antes estaban en una buena posición. Al final el «efecto Olona» se ha quedado en el «defecto Olona. Y el macarenazo quien lo ha dado ha sido el presidente de Andalucía.
SE REFUERZA EL PLAN
El plan del PP sigue igual. Viendo que la estrategia de aislar a Vox ha funcionado, se replicará en todas las comunidades autónomas y en las generales. El PP ya tenía análisis que dejaban claro que era mejor ir a por el electorado de centro que a por el de la derecha. Las elecciones andaluzas han dejado claro que han acertado de pleno.
La idea que tiene ahora el PP es básicamente sobredimensionar el mensaje de Andalucía, algo que quiere hacer Alberto Núñez Feijoo desde que llegó al poder. No habrá diálogo con Vox y la estrategia seguida por otros barones populares no se replicará de ahora en adelante. Es una buena noticia para el Partido Popular que la estrategia seguida por Feijoo y Juan Manuel
JUAN MANUEL MORENO BONILLA GANA TERRENO
El presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, ha ganado más peso en el Partido Popular. La mayoría de los visitantes de la séptima planta del edificio de Génova consideran que el sustituto natural de Alberto Núñez Feijoo al frente del Partido Popular será el andaluz. Y ahora que ha conseguido un resultado histórico en los comicios autonómicos, más. El gran resultado de Moreno Bonilla ha sido recibido con alivio por parte de los dirigentes del partido porque muchos temían que el avance de Vox podría poner en riesgo no solo la hegemonía del PP en la derecha, sino que podría alterar los Gobiernos con nuevas vicepresidencias dirigidas en la sombra por Santiago Abascal.
Tras este resultado, queda claro que la pugna por el PP tras la salida de Feijoo quedará entre Moreno Bonilla y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Pero lo más curioso es que prácticamente todos en el PP dan por hecho que el presidente gallego solo tendrá una oportunidad para hacerse con la Moncloa. Y si falla, dará vía libre a la pelea entre Isabel Díaz Ayuso y Moreno Bonilla.
Con este resultado histórico y sobretodo con la habilidad de haber frenado a Vox en Andalucía, el nombre de Juan Manuel se ha puesto en el centro de todas las quinielas. Ya sonaba entonces, cuando llegó a un pacto no escrito con el presidente de la Xunta para sacar a Pablo Casado del poder. Pero ahora queda claro que el estilo de Moreno Bonilla ilusiona entre el electorado conservador, además de que ha sido capaz de capitalizar el descontento con el PSOE. Los socialistas ya son un mero recuerdo en Andalucía y Juan Manuel Moreno es el responsable del cambio de ciclo.
