La base aérea de Albacete ha sido de nuevo el centro de referencia de formación de guerra aérea de los países europeos de la OTAN, en el marco del ejercicio/curso APROC 2022, en el que se ha distinguido el helicóptero europeo NH90.
Estamos ante el mayor curso centralizado de recuperación de personal en combate mediante aeronaves o según su designación en inglés Air-Centric Personnel Recovery Course (APROC), que se realiza anualmente en Europa.
El APROC es un muy planificado evento organizado por el Centro Europeo de Recuperación de Personal o European Personnel Recovery Centre (EPRC), al que pertenece España además de las otras seis naciones que forman parte del Grupo Aéreo Europeo o European Air Group (EAG), que son: Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Países Bajos y Reino Unido.
El APROC-2022, que se ha desarrollado durante las dos pasadas semanas, ha contado con la participación de un total 23 aeronaves, destacando la gran aportación del Ejército del Aire español, que ha empleado dos de sus nuevos helicópteros NHIndustries (suministrados por Airbus Helicopters España) NH90 (o HD.29 según designación española) del Ala 48. Además también han participado dos cazabombarderos Eurofighter (C.16) del Ala 14 y un equipo del Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (EZAPAC).
El APROC tiene como objetivo la formación de tripulaciones aéreas y fuerzas de superficie en las vitales labores de recuperación de personal, principalmente de pilotos derribados, en un ambiente operativo hostil. Aparte del factor humano, el hecho de capturar por parte del enemigo a una tripulación de aeronaves militares es de vital interés para “exprimirla” y obtener datos de “inteligencia” y un gran tanto propagandista, como estamos viendo estos días en la guerra de Ucrania, especialmente con pilotos rusos abatidos.
El EPRC, que recoge todas las experiencias en el campo del Personnel Recovery (PR) como las que vienen del actual conflicto de Este, organiza cada año de forma rotatoria en una de las naciones pertenecientes al Centro. De nuevo las magníficas cualidades de la citada instalación manchega del Ejército del Aire y su entorno han llevado, al igual que el pasado año, a volver a organizar el APROC en ésta
Como es habitual en todos los ejercicios de la OTAN se diseña una situación de crisis internacional en un teatro de operaciones simulado, en el que se va actuando a diario, mediante milimétricas planificadas misiones, tanto diurnas como nocturnas. Estamos ante supuestos tácticos de una gran complejidad, que implican a unidades de diferentes nacionalidades y roles, con la utilización de helicópteros de transporte táctico y ataque, cazabombarderos de escolta y supresión de la oposición enemiga y los equipos de extracción.
En total en el teatro de operaciones simulado se han llevado a cabo misiones diariamente, con el objetivo de entrenar el planeamiento y ejecución de manera conjunta en estas misiones y de calificar como jefes de este tipo de misiones o Rescue Mission Commander (RMC) a los pilotos más experimentados, entre ellos dos capitanes del Ala 48 y otro del Ala 14.
En esta edición, los NH90 españoles, a los que el Ejército del Aire denomina Lobo, han participado por primera vez, demostrando según la corta nota oficial del Ejército del Aire sus capacidades sobresalientes para el transporte táctico en condiciones de elevada temperatura en misiones de PC. Además este medio de ala rotaria también ha sido el “caballo de batalla” de otros participantes en el APROC-2022, como el Heer (Ejército) alemán que envió dos unidades y la Marina Nacional de Francia que desplegó uno.
Destacó también la participación italiana, cuya Aeronautica Militare Italiana (AMI) desplazó un helicóptero Leonardo HH-101, un imprescindible avión de mando y alerta temprana Gulfstream G-550 de los que les suministró Israel que designan como Conformal Airborne Early Warning (CAEW), un equipo de operaciones especiales de apoyo táctico o Supporto Tattico Operazioni Speciali (STOS) y cuatro Eurofighter.
Este evento internacional castrense ha contado además con la colaboración del Programa de Liderazgo Táctico o Tactical Leadership Program (TLP), que desde 2009 tiene sede permanente en la referida base del Ejército del Aire, y que realiza tres o cuatro veces al año un ejercicio similar pero en el campo de aviones de combate.
También en el APROC 2022 han participado otros modelos de aparatos de ala rotatoria, principalmente de Airbus Helicopters EC725 (H225M) Caracal y AS555 (h225M) Fennec del Ejército del Aire de Francia, y un AS532 Cougar y un AS665 Tigre de la Aviación del Ejército de Tierra español.
Como rara avis, en concepto de su origen norteamericano, pudimos ver un Sikorsky SH-60B de la Décima Escuadrilla de la Armada española.
Aunque los medios más interesantes, por ser la primera vez que se veían en España, fueron dos aeronaves de ala rotatoria IAR-330 de la Fuerza Aérea de Rumania, que son una variante de construcción local del antiguo modelo francés Aérospatiale (hoy Airbus Helicopters) SA330 Puma. Aunque en concreto los que vimos en Albacete eran de los modernizados al estándar dotados de sistemas optrónicos y capacidad anticarro o Sistem Optronic de Cercetare și Anti-Tanc (SOCAT) con la cooperación tecnológica de la empresa israelí Elbit Systems.