Llamar «calvo» o «Peppa pig» a un superior en el Ejército te puede costar seis meses de cárcel

Hay un nuevo héroe en el Ejército que ha sentado jurisprudencia. No sabemos su nombre, pero ha marcado un antes y un después entre los militares de las Fuerzas Armadas. Se trata de un capitán al que una militar llamó ‘Peppa pig’ entre otros insultos. Aunque no es el único al que ha dedicado unas malsonantes palabras. A su comandante también le profirió varios insultos como «inútil, calvo de mierda u ojos de sapo». Una actuación que no dejaron pasar los Tribunales Militares y llevaron a juicio a la capitán que fue imputada por cinco delitos de abuso de la autoridad y dos delitos continuados de insulto a un superior. Se trata de unas actuaciones que están penadas con unas condenas de seis meses en el caso de los insultos a un superior. Sin embargo, la Justicia Militar decidió absolver a la dicha capitana de todos los cargos debido a que los hechos no pudieron ser probados, ya que no se pudo concretar la fecha exacta en la que se cometieron. Por este motivo, desde el tribunal consideraron que los hechos cometidos por esta capitán del Ejército habían prescrito.

Los hechos tuvieron lugar entre los años 2013, 2014 y 2015, pero no se ha podido concretar la fecha exacta en la que se llevaron a cabo. Se trata de unos años en los que la capitana del Ejército de Tierra estaba destinada en la Sección de Transportes de la Compañía del Mar dentro de la unidad de Apoyo Logística nº 23 con sede en Ceuta. En palabras de sus subordinados, capitán y personal civil destinado en dicho departamento, el trato con la acusada era «muy difícil, tenso, con un comportamiento agresivo y prepotente de la misma, que generaba una situación de estrés, de nerviosismo y de miedo, provocando a veces situaciones muy tensas entre los miembros de su sección». Tanto es así que en unas fechas que no se pudieron concretar, la capitana del Ejército de Tierra se refirió a su comandante como «inútil, calvo de mierda, ojos de sapo, que no hace ni el huevo…» y a un capitán como «inútil, puto gordo, burrigordo, mierda de jefe, Peppa pig…». Sin embargo, estos no son los únicos a los que dedicó palabras mal sonantes.

«inútil, puto gordo, burrigordo, mierda de jefe, Peppa pig…»

A un brigrada se refirió, delante de otros miembros de la unidad, como «cenutrio, ceporro, inútil, vago de mierda, ojalá se muera…». Además, a un cabo 1º le llamó «inútil e inculto» y en una ocasión, con motivo de una orden de transporte en la que debía introducir un vehículo en un buque, le puso en evidencia, haciéndole llorar de impotencia. A otro cabo 1º se dirigió a él como «gandul, falso, vago, ojalá te mueras… lo grande que eres lo tienes de inútil y de vago». Respecto al personal musulmán que trabajaba en dicha sección de Transporte también dedicó distintos insultos, en especial a uno de ellos, a quien llamaba, cuando él no estaba presente, calificativos despectivos como «moro de mierda, yihadista, terrorista, inútil, no puedo ver a ese gordo de mierda». En lo que respecta al personal civil que dependía de la acusada, seguía el mismo ‘modus operandi’ y la misma actuación para referirse a ellos.

EL TRIBUNAL MILITAR ABSOLVIÓ A ESTA CAPITANA DEL EJÉRCITO

Se trata de unas actuaciones que la capitana llevó a cabo durante todo el tiempo en que estuvo destinada en dicha unidad de las Fuerzas Armadas y distintos testigos corroboraron dichas cuestiones. Sin embargo, la fecha en que se produjeron dichos hechos no se pudo concretar. Esto sumado al hecho de que distintos altos cargos de dicha unidad se posicionaron de parte de la acusada, arrojando poca luz sobre los hechos, según destaca la sentencia, y limitándose a subrayar el prestigio y profesionalidad de la acusada, hicieron que el Tribunal Militar decidiera absolver a la capitana del Ejército de Tierra de los cinco delitos de abuso de autoridad, en su modalidad de acoso profesional a subordinado, y de los dos delitos continuados de insulto a superior, en la modalidad de injuriar a un superior ante una concurrencia de personas.

Se trata de unos delitos que en su mayoría están penados con unos meses de cárcel. En este caso al tratarse de varios delitos podría haber superior el año de prisión. Sin embargo, para esta capitana llamar ‘Peppa pig’ a un capitán ha salido muy barato. Y no solo eso, sino que tampoco ha tenido condena el hecho que de se dedicara a insultar a gran parte de dicha unidad de transportes. Ya que parece que no ha dejado títere con cabeza y pocos fueron los que han escapado de sus insultos. Por lo que se detalla en la sentencia, parece que los únicos que se libraron del «comportamiento agresivo» de la acusada fueron los altos cargos de la sección, quienes además defendían la profesionalidad de la capitana. De esta forma, llamar «calvo» y «Peppa pig» a un capitán del Ejército puede salir muy barato como en este caso.