Junts aprobará este fin de semana su rumbo político, estratégico y organizativo. Una nueva etapa tras la elección en junio de Laura Borràs como presidenta del partido y Jordi Turull como secretario general. Sin embargo, el futuro de la primera en el aire como presidenta del Parlament y debates como la continuidad o no de la formación en el Govern.
En la segunda fase del congreso que Junts celebrará en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), se aprobarán las ponencias organizativa, política, municipal y sectorial, y se harán públicos los resultados de la votación de la elección del nuevo presidente del Consell Nacional, que será el exconseller Josep Rull al ser el único candidato que se presentó, de 20 miembros del órgano, del Defensor del Afiliado y de los miembros que integrarán la Comisión de Garantías.
El cónclave tiene lugar la misma semana en que la Fiscalía Superior de Cataluña ha pedido condenar a Borràs a seis años de cárcel y a 21 de inhabilitación por presuntamente fraccionar contratos cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC).
Ella lleva semanas proclamando su inocencia, asegurando que nunca ha cometido ningún delito, enmarcando el caso en la «persecución política y en el ‘lawfare», y dejando claro que no dimitirá al frente de la Presidencia del Parlament pese a las peticiones de ERC y comuns de que se aparte temporalmente hasta que se resuelva el caso.
‘LAWFARE’
A raíz de ello, el partido quiere modificar, en la ponencia organizativa, el procedimiento disciplinario de suspensión de militancia para aquellos a los que se les abra juicio oral por un delito relacionado con la corrupción, y hacer una excepción para los casos de ‘lawfare’.
En el apartado de faltas muy graves, el documento también incluye que las condenas con sentencia firme por algún delito relacionado con la corrupción, la malversación de fondos u otros delitos que atenten contra principios fundamentales del partido «no se entenderán en casos de ‘lawfare».
Sin embargo, desde la agrupación del partido en el Berguedà (Barcelona) se ha presentado una enmienda en que piden suprimir la parte que excluye los casos de ‘lawfare’, y no hacer ninguna excepción en caso de que Borràs sea condenada en sentencia firme.
Pese a que las ponencias no aborden la situación judicial del expresidente de la Generalitat y exlíder de Junts, Carles Puigdemont, el cónclave también tiene lugar la misma semana que Abogado General del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) haya considerado que la Justicia belga no puede rechazar la entrega de los encausados por el 1-O basándose en el riesgo de que se violen sus derechos fundamentales si no demuestra deficiencias sistémicas y generalizadas en España.
CONTINUIDAD O NO EN EL GOVERN
Otro de los debates que sobrevolarán en el congreso es el de la continuidad o no de Junts en el Govern, porque en la ponencia política proponen valorar en qué grado se está cumpliendo el acuerdo de gobierno con ERC y evaluar qué medidas hay que tomar, sin descartar ninguna: «En este escenario, Junts planteará a sus bases la posibilidad de seguir o no en el Govern o tomar otro tipo de iniciativas adecuadas a la situación», reza el texto.
Sobre esta cuestión, quedan bastantes enmiendas vivas, como la que propone que Junts salga del Govern después del congreso «visto el comportamiento desleal de ERC y la fuerte pérdida de confianza en Junts derivada de un mal gobierno y de una sociedad ficticia que no funciona».
Otra apuesta por que el partido proponga antes del 15 de septiembre de este año la posibilidad de seguir o no en el Govern, y afiliados de Igualada (Barcelona) piden que, independientemente de la auditoría que Junts está haciendo sobre al acuerdo de gobierno con ERC, plantee este año a las bases la posibilidad de continuar o no en el Ejecutivo catalán.
Sin embargo, otras enmiendas apuestan por no poner fechas y limitarse a tomar «iniciativas adecuadas a la situación», omitiendo la parte en que se pide seguir o no en el Govern.
DIÁLOGO Y 1-O
En la ponencia política también se considera que el recorrido de la mesa de diálogo con el Estado ha llegado a su final y propone el 1 de octubre de este año –quinto aniversario del 1-O– como «punto de inflexión» para retomar el proceso de independencia.
«Después de cinco años en que se ha dado una oportunidad sincera al diálogo, es hora de retomar el hilo del 1 de octubre y de la culminación de la independencia», recogen en el documento, donde destacan también la importancia de constituir el espacio de coordinación estratégica que prevé el acuerdo de gobierno firmado con ERC.
PACTOS MUNICIPALES
En el cónclave también se abordará la cuestión de los pactos municipales, a menos de un año para las elecciones, dado que en la ponencia de este ámbito apuestan por priorizar los pactos con partidos independentistas pero «se respetará la autonomía local teniendo en cuenta las diferentes realidades territoriales», siempre que permita aplicar su programa y defender sus propuestas.
Una de las enmiendas vivas que se ha presentado aboga por ampliar la posibilidad de pactos con los partidos que respeten el derecho de autodeterminación de Cataluña, y otra quiere añadir que se excluirán acuerdos «con la extrema derecha».
Hay otras enmiendas vivas que abogan por aclarar quién asumirá las competencias en política municipal, si el secretario de Organización, David Torrents, cercano a Borràs, o el secretario general adjunto del partido, David Saldoni, del círculo de Turull.