Seamos realistas, para muchos de nosotros escuchar la palabra “dieta” nos envuelve en un halo depresivo y deprimente que nos lleva a asumir que mientras nuestros amigos beben cerveza, vino y disfrutan de helados y comidas copiosas nosotros estaremos almorzando atún al natural.
Esto será sanísimo para el cuerpo pero un reto para tu mente. Tampoco te vamos a decir que ponerte al nivel de esos amigos que pasan olímpicamente de toda dieta sea la solución.
Alimentos saludables y cuidarse frente a la dieta
El equilibrio radica en buscar un punto medio entre los dos ejemplos anteriores y no pensar en una dieta estricta como tal sino en cuidarse lo mejor posible.
Durante el verano necesitamos reponer líquidos de forma más frecuente para evitar la deshidratación. Esto pasa más frecuentemente de lo que creemos y basta con notar la boca seca y fatiga para que el cuerpo nos advierta de esto.
Si bien esto no debe ser motivo de alarma si conviene evitar los impactos más peligrosos del golpe de calor, insuficiencia renal e incluso convulsiones a la vez que dotamos al cuerpo de alimentos saludables para nuestra salud y estética.
Si alrededor del 80% de nuestra hidratación proviene de líquidos y el otro 20% de los alimentos que comemos parece obvia la solución de incluir alimentos ricos en agua. Hagamos de estos pues nuestra “dieta” (sin serlo).
Alimentos que debemos incluir en nuestra dieta veraniega
Sandía
Con un contenido en agua de hasta el 92% esta fruta rica en vitaminas A, C, B6 y potasio no aportará del 21 al 25% de recomendación diaria de vitamina C para nuestro cuerpo.
Además de ser un alimento delicioso nos ayudará con la reparación y mantenimientos de nuestros huesos y músculos. Tanto sola como combinada en una ensalada dulce con pollo, queso y vinagre resulta deliciosa y sana.
Calabacines cocidos
Contienen hasta un 95% de agua y entre sus nutrientes clave destacan las vitaminas A, C, magnesio, potasio y antioxidantes. Cocido contiene más vitamina A que crudo y además suponen más del 40% de la ingesta diaria recomendada.
Además de mejorar la visión y el sistema inmunológico es un alimento que nos ayudará a mantener la línea tan apreciada en esta época de bikinis, bañadores y chapuzones semi desnudos.
Melocotones
Esta fruta puede llegar a tener hasta el 89% de contenido en agua. Entre sus nutrientes más importantes destacan las vitaminas A, C y E, potasio, fibra y otros antioxidantes. Esta deliciosa fruta mejora la digestión y la salud de la piel.
Incluso resulta buena para ayudarnos a mejorar nuestro tono de bronceado y es una de las favoritas como acompañante de merienda o almuerzo de los más apasionados del deporte. Por algo será.
Espinacas crudas
Con vitaminas A, C y K, calcio, ácido fólico, fibra y otros muchos nutrientes beneficiosos para la salud, las espinacas crudas son una gran opción para el verano. Además al ayudarnos con nuestro sistema digestivo y a regular la presión arterial nos evitarán ese efecto globo en nuestro abdomen.
No van a obrar un milagro por sí solas pero sí nos ayudarán bien acompañadas de ejercicio y otros alimentos beneficiosos para la salud.
En cuanto al agua, puedes tomar casi cualquier fruta y exprimirla para crear tu zumo natural e incluso echarle hierbas frescas como la menta o la albahaca. Desde luego será más divertido y sabroso que limitarte a beber agua sola siempre.
Conclusión
Como ves esto no es una dieta compleja con pautas ni alimentos caros o inaccesibles en nuestro supermercado. De hecho los encontrarás en la pequeña frutería de tu barrio, en los grandes centros o en los mejores restaurantes de comida sana (igual que en los menos buenos).
Son alimentos fáciles de integrar en tus comidas y con los que notarás que tu salud y apariencia mejora en estos tiempos de calor extremo. Si además buscas una ayuda extra te invitamos a revisar el perfil de Hivatal opiniones, expertos en suplementos y nutrición saludable desde hace años.
