PSOE mantiene su «palabra» de aumentar el gasto militar y defiende que los empresarios también «arriman el hombro»

El PSOE ha defendido que es un partido de «palabra y hechos» y ha reiterado su compromiso de aumentar el gasto militar en los próximos Presupuestos, aunque la vicepresidenta Yolanda Díaz haya dicho que ese asunto no se incluyó en las primeras reuniones sobre las cuentas públicas. Además, y respecto al apoyo de Unidas Podemos a los sindicatos frente a la patronal CEOE, los socialistas recalcan que también los empresarios «arriman» el hombro.

En rueda de prensa desde la sede socialista en Ferraz, la portavoz del partido y ministra de Educación, Pilar Alegría, ha sido cuestionada en reiteradas ocasiones sobre si el PSOE renunciaría al compromiso de aumento del gasto militar para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado, habida cuenta de que su socio en el Gobierno -y otras formaciones– se oponen a tal medida anunciada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

«La pregunta la vamos a responder a través de los hechos», ha sostenido Alegría, remitiéndose a la aprobación de los dos anteriores presupuestos y limitándose a decir en varias ocasiones que la «aspiración es mejorar la calidad de vida de los ciudadanos». Además, ha subrayado que el Ejecutivo piensa en sacar las cuentas públicas «en tiempo y forma».

RESPETAR LA NEGOCIACIÓN DE LOS AGENTES SOCIALES

Alegría ha sostenido que el PSOE confía en las negociaciones de los agentes sociales al ser cuestionada sobre las críticas recientes de Yolanda Díaz dirigidas contra la patronal. Según ella, tanto empresarios como sindicatos «han arrimado el hombro, a diferencia del PP», de ahí que la portavoz haya pedido respeto para el ámbito de negociación. Como ejemplo del «diálogo sincero», Alegría ha mencionado los 14 acuerdos con los agentes sociales, destacando la reforma laboral, de ahí que haya subrayado la necesidad de «respetar» la «buena labor» de las partes, tanto patronal como sindicatos.

La ministra de Educación ha apuntado a las «muchas diferencias» entre PSOE y PP ante las preguntas relacionadas con las discrepancias expresadas desde el sector de Unidas Podemos. «Somos un partido de palabra y de hechos, y los hechos demuestran que somos capaces de aprobar unos presupuestos expansivos», ha comentado antes de enfatizar que la «apuesta clara» es mejorar aspectos como la educación, la sanidad o las pensiones.

Las explicaciones las ha ofrecido tras presentar el calendario de «movilizaciones masivas» dentro de la campaña del PSOE con el lema «El Gobierno de la gente», para lo que se quiere implicar a los alcaldes y militantes –«el corazón del partido»– desde este próximo 1 de septiembre: la intención es poner en valor la bonificación en el Cercanías dentro de las medidas de ahorro energético por la guerra de Ucrania.

A la campaña se sumará Sánchez el próximo 3 de septiembre en Sevilla con un acto junto al alcalde de la ciudad, Antonio Muñoz, al que seguirá otro similar en Toledo el 9 de septiembre. El PSOE también ha agendado actos para conmemorar el 40 aniversario de la primera victoria de Felipe González, así como un comité un consejo territorial en Zaragoza en septiembre y a finales de noviembre la celebración de la Internacional Socialista.

ABEL CABALLERO: «SÁNCHEZ NO RESTA»

Este lunes en Ferraz, el alcalde de Vigo y presidente de la Federación Española de Municipios (FEMP), Abel Caballero, ha acompañado en la rueda de prensa a Alegría para sostener que Sánchez «no resta» porque es un «activo importante». Tanto Alegría como Caballero se han mostrado convencidos de que se puede «dar la vuelta a las encuestas», ya que, en su opinión, el PSOE «no ha perdido la calle». «Es un hecho constatable, es la realidad, el Gobierno de la gente es de Pedro Sánchez», ha apuntado el alcalde de Vigo.

Caballero ha subrayado las diferencias entre las «medidas continuas» para ayudar a la ciudadanía del actual Ejecutivo, citando el impuesto sobre los beneficios extraordinarios para la banca y eléctricas, y la gestión del último Gobierno del PP que, para hacer frente a la crisis, «ahogó» a los ayuntamientos.