Es vox populi que Isaura Leal es una de las socialistas que más goza del cariño de Pedro Sánchez. Tanto es así, que cuando un político quiere medrar en el PSOE ya es costumbre que se acerque a Isaura para ver si puede hablar bien de este aspirante directamente al presidente del Gobierno. Esta diputada ha pasado desapercibida durante años, pero siempre ha estado en el sanedrín de Moncloa. No porque tenga buena relación con Félix Bolaños o porque la tuviera con Iván Redondo: sino porque Sánchez siempre la ha tenido como una socialista leal a él y servicial. Todo esto ha disparado a Isaura Leal en las apuestas de Ferraz, que ya hablan de quiénes serán los próximos ministros tras la esperada crisis de Gobierno de enero. Algunos incluso creen que Isaura será premiada con un ministerio por los servicios prestados.
Isaura Leal tiene un currículum político discreto, pero notable. Hace días que el líder del partido la ha nombrado secretaria general del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados. Pero esto es solo el principio de lo que todos creen que será el crecimiento sin parangón de Isaura. La socialista ha sido Comisionada del Gobierno de España frente al Reto Demográfico, secretaria general del PSOE de Madrid (cargo que ocupa actualmente Juan Lobato) y Secretaria Ejecutiva de Función Pública del PSOE, además de diputada por el PSOE, claro. Todo esto no es nada comparado con la relación que mantiene con el presidente del Gobierno, algo comentado por todos y el principal motivo de ascenso en el PSOE.
Isaura Leal se había convertido en la consejera de los rumores de Pedro Sánchez. Llegó a tal punto su popularidad en la formación socialista que nadie entendía por qué el fenómeno Isaura era un escalón más a subir en la escalera del ascenso político. Todos lo sabían. Para llegar a Pedro Sánchez había pocas vías. Iván Redondo era una de ellas. En su momento, incluso el exministro de Transportes José Luis Ábalos también tenía mano con el presidente en calidad de Secretario de Organización del PSOE. Pero en realidad quien tenía la capacidad de susurrar al oído del presidente quién es o no un buen activo para ascender dentro de la formación era Isaura Leal.
Todos se pegan a ella. Los que quieren ascender y los que quieren sobrevivir. Que ahora la hayan nombrado secretaria general del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados ha sido toda una declaración de intenciones que han disparado los rumores y las apuestas en el PSOE. Ya no hay quien no crea que tras la crisis de Gobierno Isaura Leal no suba como la espuma. Y ya no hay quien cuestione que Pedro Sánchez la quiere cerca para gestionar especialmente asuntos de la formación. Isaura Leal está más que dispuesta y se ha ganado los galones. Es vox populi que en enero de 2023 habrá cambios profundos en el Gobierno y se abrirán muchas secretarías de Estado y algunos ministerios. E Isaura Leal encabeza las apuestas en el PSOE.
Fuentes del PSOE dejan claro que la función de Isaura Leal es nada menos que dejar claro en Moncloa qué socialistas son leales y cuáles no. Esa es, valga la redundancia, su principal labor dentro de la formación. Sánchez confía plenamente en ella hasta el extremo de que la está dejando manejar los hilos del partido a su antojo para colocar y quitar a quien considere. Pero lo más importante es que Isaura también tiene la capacidad de impulsar la carrera política de quien le caiga en gracia. De ahí que hasta Juan Lobato se haya pegado a ella para aprender cómo medrar en un PSOE en el que el único requisito para crecer es el de caer en gracia al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
PATXI LÓPEZ QUIERE LO DE ISAURA
Patxi López quiere más. Le han ratificado en su partido para ser el portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados. Pero para Patxi no es suficiente. Fuentes solventes de la formación aseguran que el parlamentario se siente algo “menospreciado” dentro de la formación porque no le han premiado lo suficiente por su lealtad. El presidente del Gobierno concedió hace varios meses una batería de indultos a todos aquellos viejos socialistas que no apoyaron su candidatura para ser líder del PSOE que llevó a personas como Óscar López o Antonio Hernando a la Presidencia de Gobierno, pero Patxi se ha tenido que conformar con un puesto que le sabe a poco. Desde el entorno del socialista aseguran a MONCLOA.com que Patxi López aspira a mucho más. Y espera, como poco, que en la purga que se espera para enero le den algo más que la portavocía del Congreso de los Diputados, esa que le da un plus importante en su salario.
