El abogado José Mariano Benítez de Lugo se ha quedado solo ante los fondos buitre. El PSOE ha dado la espalda a una guerra de justicia social porque está más preocupado por el nombre de los candidatos en Madrid que por cualquier otra cosa. Esas viviendas que se vendieron bajo la alcaldía de Ana Botella a los fondos buitre a precios de risa han quedado en el olvido para los socialistas, que la consideran una batalla oxidada del pasado que ya no les puede dar ningún rédito político. Han sido los concejales de Recupera Madrid José Manuel Calvo y Luis Cueto los que han reactivado esta lucha amparando a Benítez de Lugo, un histórico abogado socialista que a sus 81 años sigue plantando cara al fondo buitre Blackstone representado por uno de los mejores bufetes de abogados del país.
Mar Espinar no quiere ni oír hablar del tema porque para ella esto debe ser pasado. En el PSOE de Madrid hay quien no entiende como la delegación municipal del partido ha abandonado a su suerte a Benítez de Lugo en su lucha contra el fondo buitre, algo que podría arrastrar a la exalcaldesa Botella a los tribunales. De momento, el abogado ha conseguido que los inquilinos a los que les arrebataron sus casas puedan pagar lo mismo que lo que pagó Fidere, uno de los brazos de Blackstone, para hacerse con el control de estas viviendas públicas. Son muchos los que han conseguido tener los mismos privilegios que en su momento le dieron al fondo buitre y que ahora han podido recomprar estas viviendas a precios que rondaban los 70.000 euros. Pero el PSOE se ha desmarcado.
En su lugar, Recupera Madrid, de la mano de José Manuel Calvo y Luis Cueto, dos concejales del Ayuntamiento de Madrid, han arropado a Benítez de Lugo y se han comprometido a retomar esta lucha que Mar Espinar y el grupo municipal socialista habían dejado completamente olvidada. En un acto conjunto, el histórico abogado socialista ha recordado que es necesario seguir luchando contra Blackstone dado que hay muchos afectados por esta venta de vivienda protegida a los fondos buitre que no han tomado medidas legales contra la situación. De momento, son muchas las viviendas que Benítez de Lugo ha recuperado pese a que ha tenido que recurrir al Tribunal Superior de Justicia de Madrid para que le dieran la razón. En el PSOE empiezan a lamentar el haber perdido la oportunidad, pero desde luego no han quedado bien con el que es uno de sus abogados más reconocibles.
El abandono de esta causa tan sonada por parte directa del PSOE es fruto, según fuentes consultadas por MONCLOA.com, de la guerra interna que tienen para las candidaturas. Estas mismas fuentes relatan a este medio que Mar Espinar solo está preocupada por «salir en la televisión» y por intentar aumentar sus apoyos para lanzarse a la candidatura del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid. Desde el Partido Socialista lamentan que la guerra les haya alejado de pesos pesados del partido como José Mariano Benítez de Lugo, pero entienden que Recupera Madrid ha estado hábil a la hora de recoger esta bandera.
Este abogado ha dado grandes alegrías al PSOE que no han dudado en capitalizar en cuanto han podido. Fue a quien amenazó José Luis Bárcenas cuando entró en prisión, pues fue quien solicitó su ingreso en la cárcel en cuanto tuvo ocasión. Fue también quien sentó al expresidente del Gobierno Mariano Rajoy en el banquillo por el caso Gürtel. Y es quien está defendiendo los derechos de los afectados por los fondos buitre mientras Mar Espinar y todo el grupo municipal socialista se dedica a trabajar en su candidatura ahora que Mercedes González está fuera de juego.
La sensación de derrota es generalizada en la formación tras ver cómo José Mariano lleva años en esta lucha sin amparo del partido. Quienes tienen un poco más de bagaje en la formación son conscientes de que José Mariano es uno de sus históricos abogados y son los primeros que lamentan que Mar Espinar, en calidad de representante del partido en funciones, no haya sido capaz de mantener viva la llama de los fondos buitre dado que Benítez de Luego sigue cosechando victorias judiciales ante Blackstone por este asunto. Pero no parece que los más jóvenes estén preocupados por mantener viva esta causa que consideran de justicia.