La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha agradecido este viernes la «gran humanidad» de los militares que han trabajado en las labores de extinción de los incendios ocurridos en distintas localidades españolas este verano.
Así lo ha señalado en la Escuela Naval Militar de la localidad pontevedresa de Marín, hasta la que se ha desplazado para inaugurar el curso académico 2022-2023, donde ha puesto en valor el esfuerzo de todas las fuerzas armadas, en concreto del Ejército de Tierra, en las situaciones de emergencia que vive el país.
En este sentido, se ha referido tanto a la pandemia como a los incendios vividos este verano en España, subrayando la «gran humanidad» y la «voluntad de servicio» de los militares. «Si alguien ha estado en primera línea, esos han sido los hombres y mujeres de las fuerzas armadas, cada vez que hay una situación difícil», ha añadido Robles durante su discurso en el acto.
Tras enviar un saludo a todos los militares que se encuentran en diferentes partes del mundo llevando a cabo sus labores profesionales, además de a sus familias que los echan de menos, ha hablado directamente a los alumnos de las diferentes escuelas militares de la armada española, que estaban conectados por videoconferencia.
A ellos les ha explicado lo «esencial» que es la formación, en un mundo que va «muy de prisa», por lo que ha destacado la importancia de las nuevas tecnologías y de la nueva enseñanza digital militar, tema que centró gran parte del acto.
COMPAÑERISMO
Robles ha puesto el foco en valores tan importantes como el compañerismo que es, a su juicio, «lo que hace grande a las fuerzas armadas de España», además de la «entrega y dedicación» de los militares.
«Os formáis en algo tan fundamental como es servir a España, a sus ciudadanos. Estar con ellos cuando están bien y cuando lo están pasando mal», ha añadido la titular de la cartera de Defensa.
También ha tenido palabras de recuerdo para Pablo Jerez Sanjuán, cadete de 22 años que falleció el año pasado en la Academia General Militar de Zaragoza, y para Andrés Marín, que sufrió un accidente mortal el octubre pasado cuando realizaba maniobras en el Centro de Buceo de la Armada. «Andrés, Pablo, estéis donde estéis, nuestro cariño, aprecio y orgullo», ha subrayado Robles.
Margarita Robles ha insistido a los alumnos sobre la importancia de aprender a valorar al resto de sus compañeros, ya que «estos años no volverán» y con el paso del tiempo siempre recordarán a sus amigos que un día conocieron en la formación.
