Meritxell Batet parece que quiere proteger al Gobierno. La presidenta del Congreso de los Diputados y los miembros de la mesa de esta cámara reciben todas las preguntas que los diputados de los distintos grupos parlamentarios presentan. Sin embargo, ellos también tienen la potestad para admitir estos escritos o no. Y hay un político al que le han tumbado gran parte de las preguntas que ha presentado y los motivos resultan cuanto menos sorprendentes. Se trata de Pablo Cambronero, el político del grupo Mixto, quien ha presentado un sin fin de preguntas durante este verano, pero, para su sorpresa más de la mitad no han sido admitidas. Además, la razón que da Meritxell Batet para no aceptar estas preguntas es que las medidas que aprueba el Gobierno no son competencia del Gobierno, a pesar de que muchas de estas cuestiones versan sobre medidas aprobadas en el Consejo de Ministros. De esta forma, Meritxell Batet ha decidido aclarar que no es competencia del Gobierno las medidas que aprueba el Gobierno.
Pablo Cambronero es uno de los políticos que más preguntas presenta ante la Mesa del Congreso de los Diputados. Se ha convertido en la pesadilla del Gobierno, dado que no duda en cuestionar las medidas que se toman cuando considera que es necesario que detallen las iniciativas que aprueban. Sin embargo, Meritxell Batet se lo está poniendo un tanto difícil a este diputado dado que está en su poder el aceptar o no este tipo de preguntas y parece ser que no está por la labor de admitir muchas de estas solicitudes. Y es que, desde que comenzó el verano este político ha presentado entorno a 50 solicitudes, de las cuales cerca de 40 han sido inadmitidas. Además, lo que resulta llamativo son las razones que Meritxell Batet ha dado a este político para no aceptar estas preguntas.
Y es que, parece ser que la presidenta de la Cámara Baja ha decidido blindar al Gobierno y tratar de protegerle en la medidas de lo posible. Así, Meritxell Batet, dado que tiene potestad para aceptar o no las preguntas de los diputados, ha decidido ayudar al Gobierno y no ponerle en la tesitura de tener que responder ciertas preguntas que pueden resultarles un tanto comprometidas. Y esto es lo que ha hecho con las solicitudes de información que ha presentado Pablo Cambronero. Además, Meritxell Batet ha argumentado que las medidas del Gobierno no son competencia del Gobierno. Sin embargo, muchas de estas preguntas versan sobre medidas e iniciativas que han aprobado en el Consejo de Ministros.
Una situación que no ha dudado en denunciar este político a través de cuenta de Twitter, donde ha escrito: «Meritxell Batet deniega (con su firma) prácticamente todas las preguntas que he presentado en julio y agosto. Las excusas son irrisorias. Esto atenta contra las más elementales normas del parlamentarismo democrático». Además, también ha detallado que muchas de las preguntas que ha planteando y que han sido denegadas tratan sobre asuntos publicados en el Consejo de Ministros. De esta forma, la presidenta del Congreso de los Diputados aclara que no es competencia del Gobierno las medidas que aprueba el propia Gobierno.
Sin embargo, esta política no es la única que trata de blindar al Gobierno para que no tengan que responder a preguntan que pueden resultarles un tanto incómodas. Se trata de Félix Bolaños, el ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, quien parece que se ha convertido en el «Rasputín» de la libertad de expresión en España. Y todo para que no se hable que aquellos temas que resultan incómodos para el Ejecutivo como la próxima crisis del Gobierno, que previsiblemente se llevará a cabo a principios del año 2023. Un tema sobre el que Pedro Sánchez no quiere ni oír hablar.
MERITXELL BATET NO ES LA ÚNICA QUE TRATA DE BLINDAR AL GOBIERNO
Pedro Sánchez no quiere que se hable de la crisis de Gobierno; para el presidente, carece de todo valor la información que se ha filtrado de lo que podría pasar en La Moncloa después del verano y que anuncian los posibles cambios que habrá dentro del Ejecutivo, por lo que decidió enfilar toda su artillería contra los medios de comunicación a quienes señaló de no informar sino de intoxicar. El presidente de Gobierno y sus aliados abonan el terreno para darle paso a lo que será la política de Gobierno a partir de ahora, de arremeter contra los medios de comunicación y contra los periodistas que hagan filtraciones de informaciones que sean consideradas relevantes para el Ejecutivo. Detrás de toda esta estrategia está el contenido de las letras pequeñas del proyecto de ley se Secretos de Oficiales y su principal promotor, el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, quien pretende convertirse en el «Rasputín» de la libertad de expresión en España.