Vox intentará que Olona ejerza de revulsivo contra Núñez Feijóo

El constante crecimiento del Partido Popular en las encuestas bajo el liderazgo de Alberto Núñez Feijóo está inquietando a Vox, que en poco más de un año y medio ha pasado de soñar con el sorpasso a necesitar un revulsivo para mantener oxígeno.

El golpe de efecto otoñal que sopesa Santiago Abascal sería la restauración de Macarena Olona tras su salida de la política después de sus decepcionantes números en Andalucía. La alicantina aspiraba a ejercer de vicepresidenta autonómica, pero la mayoría absoluta de Juanma Moreno impidió que tocasen moqueta.

PALOS AL GOBIERNO

Santiago Abascal también quiere mantener un tono crítico contra el Gobierno de España para diferenciarse del PP. El portavoz de Vox ha mostrado su hartazgo contra Pedro Sánchez: «Elimine los impuestos abusivos sobre la luz, el gas y los carburantes, reduzca el IVA a los productos básicos, reduzca su Gobierno, el gasto político y sindical, ahórrenos la propaganda de su Gobierno y derogue las leyes climáticas que están arruinando el campo la industria y los hogares», aseguró. 

Menos pendiente del Gobierno parece Olona, que este verano ha hecho el Camino de Santiago y ha asegurado que necesitaba desconectar de la política: «No es el momento de la política y no es sobre lo que he reflexionado, porque la política quedó fuera de la mochila. He vuelto al lugar en el que quería estar, al lado de los españoles a quienes tanto tengo que agradecer. Si tengo que recorrer ahora toda España para estar a su lado y que ellos puedan estar al mío, lo haré. El amor vence siempre», señala.

BATALLA A CUENTA DEL CATALÁN

Otra batalla de Vox será la política lingüística de la Generalitat de Catalunya. El partido conservador ha presentado un recurso de inconstitucionalidad contra el Decreto-ley del Goierno catalán que pretende sortear el fallo del TSJC que establece un mínimo del 25% de la enseñanza en castellano. 

Vox cree que este Decreto-ley que no es más que un «escudo jurídico que el Govern trata de ofrecer a los colegios para que así puedan incumplir con toda libertad la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que les obliga a ofrecer un mínimo del 25% de la enseñanza en español».

«Es una estratagema con la que el Gobierno catalán pretende evitar que se lleven a efecto la sentencia y el auto del TSJC. Una vez más, el gobierno de la Generalitat permite que se sigan pisoteando los derechos y las libertades del conjunto de los catalanes expulsando el español de las aulas«, explican.

40 RECURSOS DE INCONSTITUCIONALIDAD

El partido de Abascal recuerda que ya son 40 recursos de inconstitucionalidad presentados por los 52 diputados del grupo parlamentario ante el Constitucional y afirma que el Govern intenta «establecer la lengua catalana como la predominante dejando el español en asignaturas de menor trascendencia o incluso en asignaturas optativas». 

«La cooficialidad ha de sujetarse a un patrón de equilibrio o igualdad entre las lenguas sin otorgarse prevalencia o preponderancia a una sobre otra», opinan. Y es que, según afirman, la propuesta de la Generalitat «viola la delimitación de competencias que realizan la Constitución y los Estatutos de Autonomía».