El Gobierno reconoce que dejó «seco» el Plan MOVES durante meses y recicla los fondos

La vicepresidenta del Gobierno Teresa Ribera ha revivido un plan que se había oxidado con el paso del tiempo. La idea de que para comprar un coche eléctrico, el Ejecutivo te ayuda con algo de dinero, se ha extendido como la pólvora, pero los propios concesionarios han reconocido a MONCLOA.com que no siempre es fácil que haya fondos del Plan MOVES para disponer de ellos. Sin embargo, Teresa Ribera ha utilizado su ministerio para reciclar los fondos de este plan con dinero directo de la UE para ver si de cara a las elecciones pueden conseguir el voto de algún que otro conductor despistado. La inyección de los fondos europeos para esta cuestión es de nada menos que 264 millones de euros. Ahora se delegarán parte de estos fondos para un nuevo plan que busca darle el dinero a las empresas o entidades públicas que lo quieran, pero queda claro que tras un año de sequía, se pretende electrificar el parque móvil lo antes posible.

Quizá las mayores polémicas vienen de la mano de los tiempos. A lo largo del año, prácticamente la totalidad de los concesionarios reconocían que ya no disponían de fondos para aplicar el Plan MOVES. Las marcas aplicaban los descuentos en sus carteles publicitarios de esos 7.000 euros a los que podías optar, pero lo cierto es que no se mojaban a la hora de hablar sobre si la administración pública devolvería ese dinero al comprador. Así han permanecido durante meses hasta que ahora el Ministerio de Transición Ecológica ha intentado dar la vuelta a la tortilla para ver si así se mejora la imagen del Gobierno. Parte de este dinero será transferido a las comunidades autónomas, pero el Ejecutivo tirará de «Iván Redondo Producciones S.L.» para escenificar que son ellos quienes conceden esta ayuda.

Son 264 millones de euros. Pero un dinero que viene por los compromisos adquiridos por el Gobierno con Europa. La idea de reciclar el Plan MOVES no es algo que se venderá de este modo, según detallan desde el Gobierno. Desde el Ministerio de Transición Ecológica venden una «versión oficial» que poco tiene que ver con la realidad. Para ellos, el Plan MOVES nunca se ha atascado y siempre ha dispuesto de fondos, una realidad que choca frontalmente con los gestores de los concesionarios con los que ha hablado este medio. Cuando se bucea en este problema, el Gobierno insiste en que ellos habían transferido el dinero a las comunidades autónomas y en que sí había fondos necesarios. Sin embargo, las propias comunidades, como el caso de la Madrid, con la que se ha puesto e contacto este medio, detallan que los fondos fueron insuficientes porque se agotaron en pocos meses.

El Gobierno ha puesto en marcha un nuevo Plan MOVES que solo se dedica a las empresas, generalmente, o personas jurídicas que vayan a presentar proyectos lo suficientemente atractivos como para electrificar la movilidad.

Nunca nadie aclaró de quién era la culpa. La Comunidad de Madrid insiste en que a ellos les dieron fondos insuficientes y que se agotaron muy pronto, por no hablar de que hay otras cuestiones como el hecho de que nunca se recibió una respuesta clara para «reciclar» esos fondos para el Plan MOVES III en forma de proyectos para empresas. El atasco de las ayudas duró bastante tiempo, de hecho, en la Comunidad de Madrid reconocen que no hubo fondos durante muchos meses. Aún así, el Gobierno insiste en que la culpa de que en la capital no hubiera fondos suficientes es por la gestión de Isabel Díaz Ayuso. Pero ahora han recargado el Plan MOVES III de forma discreta para ver si así se evitan nuevos titulares negativos.

Teresa Ribera será de las primeras en salir si tiene lugar esa crisis de Gobierno

Que sea Teresa Ribera la que ha anunciado esta ayuda no tiene nada que ver con el hecho de que confíen más o menos en ella. En el Ejecutivo la dan por amortizada a nivel político e insisten en que es de las primeras en salir si tiene lugar esa crisis de Gobierno que se prevé para enero de 2023. El Plan MOVES III es una cuestión de fondos europeos gestionados a través de las comunidades autónomas y Ribera es simplemente la titular del ministerio. Aún así, dispone de una partida con pocos precedentes para gastar en la electrificación de los coches de España.

Las ayudas son de hasta 7.000 euros siempre que se compren un coche eléctrico. El problema es que el sector del automóvil no va necesariamente de la mano de los intereses del Ejecutivo. Ahora mismo, el periodo de espera para comprarse un coche eléctrico nuevo es de varios meses, eso siempre que consigan fabricarlo a tiempo. Las ayudas llegarán siempre que haya fondos, aunque el Gobierno las paga tiempo después y también se permite el lujo que quitarte parte de esa subvención en la declaración de la renta. En cualquier caso, esta reactivación del Plan MOVES III no solo busca ayudar a los españoles de cara a las elecciones, sino que también pretende reactivar el mercado del automóvil, en una situación algo dramática desde hace tiempo.