Urkullu advierte que se encara un «período de tormentas»

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha advertido que como consecuencia de la coyuntura internacional se encara en otoño un «período de tormentas», pero defiende por contra que Euskadi cuenta con «unas bases sólidas».

En una entrevista a Diario Vasco, el presidente vasco defiende que el derecho a decidir debe ser «un punto de encuentro» y cree que la UE debe ofrecer «un paraguas» para las consultas refrendatarias».

Tras advertir que se encara un periodo de desaceleración, con previsiones de crecimiento económico de un 4,3% que «hay que ajustar», Urkullu indica que ante la persistencia de la agresión unilateral de Rusia a Ucrania y de las consecuencias del encarecimiento de la energía se va a «vivir un período de tormentas».

«Pero también tenemos que seguir alimentando la tranquilidad y la confianza, porque estamos en una situación muy vinculada a la estabilidad institucional y política», argumenta.

En este contexto, sostiene que no se está en una situación similar al año 2008 con la crisis financiera que luego tuvo un rebote en el año 2012. «Tenemos unas bases sólidas, cuando además tenemos un 25% del valor añadido bruto en la industria, con un compromiso de cohesión social con todas las políticas sociales que venimos arbitrando desde hace muchos años, con un riesgo de tasa de pobreza del 13%, cuando la media en Europa es del 22%. Estamos en una comunidad en la que el tercer sector tiene un papel muy relevante. Tenemos bases sólidas para hacer frente a todo eso», añade.

Asimismo, defiende que la fiscalidad en Euskadi es «progresiva» y critica por contra que en el Estado se asiste a una carrera de medidas fiscales por territorios con las que no se identifica. «Se está dando una disputa ideológica sin pensar en la cohesión social. A la vez, quien plantea la rebaja fiscal al mismo tiempo pide una mayor financiación autonómica. Realmente no es ejemplarizante», rechaza.

Por otro lado, reconoce que el preocupa la posibilidad de que se produzca «un otoño caliente» de conflictividad social, tal y como advierten los sindicatos, y cree que la realidad social es «muy diferente a esos anuncios». «No veo razones para ese otoño caliente. No somos una isla, no somos un oasis, y vivimos las consecuencias del contexto global del que formamos parte», añade.

ESTATUTO

Respecto al incumplimiento del Estatuto, recuerda que la Carta Autonómica cumple el próximo 25 de octubre 43 años y detalla que en este momento están sobre la mesa seis materias para traspasar.

«Hay otro listado -desde aeropuertos y puertos, la gestión del régimen económico de la Seguridad Social o la ley electoral- que está en el cronograma aprobado por el Gobierno español, que es un compromiso que por primera vez adopta, pero no se está cumpliendo», lamenta, para añadir que «los representantes del PSE en el Gobierno Vasco sí están absolutamente comprometidos» en la defensa del Estatuto.

Por otro lado, defiende que no es lo mismo una Comisión Mixta de Transferencias, que se reúne para dar cumplimiento formal a una negociación, a una Comisión Permanente que tiene que analizar lo que está pendiente y marcar la hoja de ruta.

Respecto al debate sobre la plurinacionalidad en el Estado, cree que «debiera haber madurez» para encararlo, «cuando menos en la clase política y la representación institucional después de 44 años de existencia de la Constitución Española y de un Estatuto de Gernika desde 1979».

Cuestionado por el proyecto de Presupuestos del Estado afirma que para Euskadi hay «una menor inversión de lo que nos corresponde por el PIB o por el número de habitantes», así como «una amenaza con respecto al Cupo que hemos de pagar al Estado». «Lo hemos tomado como un planteamiento de orientación provisional, vamos a esperar a marzo o abril. Pero lo tomo con preocupación», añade.

Asimismo, considera que en relación al terrorismo falta aún un reconocimiento claro del daño causado «por quienes lo provocaron y lo justificaron tanto tiempo», algo que ve como asignatura pendiente de EH Bildu: «Ese reconocimiento del daño causado es una cuestión que considero clave».

DERECHO A DECIDIR

Por otro lado, desea que en Cataluña se puedan mantener los acuerdos que garanticen la estabilidad tras la ruptura del Govern y niega haber renunciado al derecho a decidir.

«Como lehendakari no he renunciado ni al concepto de nación foral, ni al concepto de confederabilidad, ni al régimen de bilateralidad ni al derecho a decidir. Pero el derecho a decidir no está normativizado jurídicamente en el Estado español, por eso planteé la directiva de Claridad en las instituciones europeas en 2018 cuando aportamos nuestra visión sobre el futuro de Europa desde el Gobierno Vasco», asegura.

Según su propuesta, en el seno de la Unión Europea debería haber «un paraguas para que en los estados miembros pudiera haber consultas refrendatarias que sirvieran tanto para lo que es la decisión de separarse como también de unirse».

«El derecho a decidir debe ser un punto de encuentro. Por eso planteo también que el derecho a decidir sea la consecuencia de un punto de encuentro respetando la pluralidad y la diversidad. Un nuevo pacto», agrega.