Sánchez quiere recuperar el ímpetu con políticas sociales, periferia y nostalgia

Pedro Sánchez quiere recuperar el ímpetu perdido mediante una estrategia que tiene por objetivo que el PSOE recupere fuerza por el centro tras el crecimiento del Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo en los caladeros más templados. 

El presidente del Gobierno ha anunciado una amplia batería de medidas que supondrán una inversión de alrededor de 3.000 millones de euros «para proteger al 40% de los hogares», asegura. El refuerzo del bono social eléctrico, la puesta en marcha de una ayuda a familias con caldera centralizada de gas natural y la mejora del bono social térmico aliviará a las capas más vulnerables.

Otro recurso de Sánchez busca conectar con la ciudadanía más sensibilizada con la despoblación de gran parte del territorio español. El Gobierno ha anunciado bonificaciones fiscales al empleo indefinido en las provincias más afectadas por esta dinámica: las ‘periféricas’ Soria, Teruel y Cuenca. 

SÁNCHEZ TIRA DE NOSTALGIA

Pedro Sánchez no quiere abstenerse de recuperar el voto de los colectivos de mayor edad y para ello se ha lanzado a abrazar al ‘felipismo’ mediante la celebración del 40 aniversario del primer triunfo de Felipe González.

La sede socialista sita en la calle Ferraz acoge la exposición ’40 años de democracia, 40 años de progreso. 1982-2022′ que, organizada por el Partido Socialista y la Fundación Pablo Iglesias, conmemora el 40 aniversario de la victoria electoral de 1982.

Antes de su inauguración el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a los expresidentes Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, y el exsecretario general del partido, Joaquín Almunia, recorrieron la exposición junto a la vicesecretaria general y ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la presidenta del Partido Socialista, Cristina Narbona; y el secretario de Organización, Santos Cerdán.

Sánchez afirmó que el PSOE mira «al pasado con ojos del presente y con sed de futuro» mientras Felipe González sacó pecho porque sus mandatos supusieron «un periodo de modernización de España» gracias a la inversión en infraestructuras y a la creación de la sanidad y la educación universal, pilares del Estado de bienestar.

EL PRESIDENTE NO APARCA SU DISCURSO ANTIESTABLISHMENT

El presidente del Gobierno ganó las primarias del PSOE en 2017 con un aguerrido discurso antiestablishment que ahora ha vuelto a salir a la luz. Sánchez ha apostado por desempolvar su retórica más crítica al asegurar que «las fuerzas progresistas y la España progresista tienen en frente un poder que no es menor, que es el poder del dinero, que tiene sus terminales».

El socialista se dirigió al diputado Joan Baldoví en el Congreso para mostrarse como víctima de algunos medios como COPE: «Usted, como yo, se desayuna leyendo la prensa madrileña, también escuchando a la Conferencia Episcopal hablando a través de la radio o también lógicamente aquí tenemos a las terminales políticas de esos intereses que representan al dinero». 

AFERRADOS AL CIS Y A RTVE

En La Moncloa se aferran al control de RTVE gracias a la atribución de competencias ejecutivas a la nueva presidenta Elena Sánchez Caballero vía decreto. También dan por buenos los escasamente creíbles números que sirve el CIS, que acaba de servir una encuesta que asegura que el PSOE aventaja al PP en cuatro puntos.

La portavoz socialista Pilar Alegría asegura que estas cifras «evidencian una constante que se viene observando desde el verano: el incremento del apoyo que está recibiendo el Partido Socialista se da al mismo tiempo que el Partido Popular se estanca o incluso baja sus apoyos no solo en el CIS, sino también en otras encuestas». 

La ministra de Educación destacó que Pedro Sánchez sigue siendo el líder político al que un mayor número de españoles califican como la mejor opción para presidir el país, siempre según el instituto gubernamental.