Alberto Garzón se gastará 45.000 euros en decirte que estás gordo por no leer

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha decidido lanzar una nueva campaña para advertir a los españoles sobre sus hábitos de consumo. Ahora, el ministro ha decidido sacar de las arcas públicas cerca de 45.000 euros para hacer una campaña de publicidad para enseñar a los ciudadanos «hábitos de alimentación saludable». Estrategia con la que Garzón espera acabar con el sobrepeso de los españoles a través de una campaña informativa de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria sobre «cómo leer el etiquetado de los productos».

Alberto Garzón, el actual ministro de Consumo, se ha convertido en todo un experto a la hora de provocar polémica desde su departamento ministerial. Y es que muchas han sido las declaraciones del representante de Izquierda Unida que han hecho enfurecer a los distintos actores económicos, que han visto peligrar sus puestos de trabajo, y con ello sus ingresos, debido a las provocativas palabras del ministro.

Ahora, son los propios consumidores los escogidos por el Ministerio de Consumo para su próxima campaña. Y es que el departamento de Garzón, a través de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, no ha dudado en señalar que la obesidad, uno de los mayores problemas de salud de la ciudadanía española en la actualidad, puede estar más que relacionada con la correcta lectura de las etiquetas de los productos comestibles.

CONSUMO TE ENSEÑA A LEER ETIQUETAS

«Entre las prioridades de la Administración General del Estado en materia de publicidad y comunicación institucional en el año 2022, se encuentra la promoción de hábitos de alimentación saludables y sostenibles […] con el fin de aportar conocimiento, de forma didáctica, sencilla y apropiada que ayude a la ciudadanía a adoptar cambios en sus estilos de vida» destacan desde el Ministerio de Consumo. Palabras con las que han justificado la nueva campaña de publicidad del departamento de Alberto Garzón, centrada en la obesidad de la ciudadanía española.

«Desde hace más de dos décadas en España, las cifras de la obesidad suponen un serio problema de salud y un verdadero reto de salud pública» aseguran los documentos oficiales de Consumo. «El 54,5% de los adultos tiene exceso de peso» señalan, según las cifras que ofrece el Ministerio de Consumo.

Una obesidad que desde el ministerio de Consumo ahora se intentará combatir a través de las etiquetas de información sobre los alimentos. Y es que, tal y como explican los documentos oficiales, «el consumo de alimentos saludables es más frecuente en las familias de mayor nivel de ingresos». Algo que hace, según el ministerio, que aquellos con menores ingresos en sus hogares, acaben padeciendo problemas de sobrepeso u obesidad.

Una situación que Alberto Garzón ha decidido solventar, no a través de defender un consumo más responsable o saludable, sino a través de una campaña publicitaria que enseñará a los españoles a leer las etiquetas de los productos que consumen. Campaña que parece querer dar a entender que la obesidad y el sobrepeso se pueden «corregir aprendiendo a leer».

«A pesar de las ventajas potenciales que ofrece al consumidor este tipo de etiquetado, hay evidencia de que dicha información nutricional no es bien comprendida por los consumidores, y que el impacto de este Reglamento no es el esperado en cuanto a la mejora en las decisiones de compra y consumo de alimentos. Además, la dificultad de su comprensión es mayor en clases sociales más desfavorecidas y vulnerables» destacan los documentos oficiales a los que ha tenido acceso este diario.

Palabras con las que el ministro defiende el gasto de 45.000 euros de las arcas públicas del Estado en crear una campaña centrada en el «aprendizaje» de este etiquetado, especialmente por las clases que Alberto Garzón considera más «vulnerables» por su bajo nivel económico o social.

Enseñanza que centrará, en primer lugar, en «trasladar información veraz sobre los principales comentarios negativos e informaciones contradictorias«, o «informar al consumidor de la información que puede encontrar en el etiquetado de alimentos y bebidas, y cómo utilizarla para hacer un consumo seguro y responsable»; eso sí, haciendo de nuevo hincapié en «los grupos sociales más desfavorecidos».

LA POLÉMICA SIGUE CERCANDO A ALBERTO GARZÓN

Una nueva campaña del ministro de Consumo que vuelve a posicionarle en el punto de mira del sector de la alimentación, que atraviesa ahora uno de sus momentos más complicados, debido a la fuerte subida del IPC, que ahoga a las familias españolas, y cuyos precios son casi inasumibles.

Una guerra abierta del ministro de Consumo contra el propio consumo de los españoles que tenía de nuevo un momento álgido hace apenas unas semanas, cuando Alberto Garzón volvía a cargar públicamente contra el sector cárnico. «Un nuevo estudio sugiere, otra vez, que reducir el consumo de carne y reforzar las redes de transporte público podrían contribuir de forma notable a salvar el planeta» destacaba el ministro en sus redes sociales, que volvía así a incendiar la polémica contra su gestión.