Javier Lambán abandona a Emiliano García-Page y «se entrega» al rodillo de Santos Cerdán

El PSOE tiene un problema que ha iniciado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y que ha continuado el presidente de Aragón, Javier Lambán. Con Page han tirado la toalla y ya solo buscan que gane las elecciones Paco Núñez, el candidato del Partido Popular. Pero con Lambán tienen esperanzas de encauzar de nuevo la relación dado que aún resiste en las encuestas pese al esperado sorpasso del PP. Fuentes del PSOE dejan claro que la única razón por la que entienden que el presidente de Aragón se ha distanciado es por la sedición. Y desde el PSOE creen que pueden traer de nuevo a Lambán al redil del “sanchismo” y alejarle de la tendencia “suicida” de García-Page. De momento, desde el Partido Socialista están intentando reconciliar a todos los díscolos antes de las elecciones. Y a Javier Lambán, presidente de Aragón, no le dan por perdido.

Javier Lambán está visiblemente ofendido con la forma que el PSOE ha tenido de ceder ante ERC. Pero parece que es el único escollo que tiene que superar el partido para reconciliar a Lambán con la línea del Gobierno. La idea que tienen es que el presidente de Aragón abandone cuanto antes ese grupo que ha formado el presidente de Castilla-La Mancha para así aislar el problema que supone el barón manchego. Lambán lo intentó, pero no parece suficiente para el presidente de Aragón las tesis que ha puesto encima de la mesa el socialista rebelde. De hecho, desde Ferraz ya venden el discurso de que el presidente de Aragón está completamente en la línea de las tesis que defiende el Gobierno central. Y mientras tanto, las encuestas auguran en resultado agridulce para Lambán que le arrebataría la victoria pero le dejaría la presidencia de Aragón.

El presidente de Aragón tiene una animadversión hacia todo lo que tenga que ver con el independentismo catalán y Emiliano García-Page aprovechó la presión de ERC para llevarle a su lado. El presidente manchego lleva tiempo intentando montar una revolución interna como la que en su momento protagonizó la expresidente de Andalucía Susana Díaz, pero no parece que esté consiguiendo resultados. El PSOE confía en que ha conseguido someter a Lambán porque ha votado en la línea de lo dictado por Ferraz en más de una ocasión. Y desde el PSOE consideran que no tendrán que lidiar con más temas tensos de esta naturaleza de aquí a que se celebren las elecciones. Todo son buenas noticias, aparentemente.

Tampoco hay que obviar el trabajo de Santos Cerdán en este asunto porque ha conseguido mantener abiertos los contactos con Aragón. La buena noticia es que, según detallan las fuentes de Ferraz, Lambán nunca se opuso en nada más que no fuera ceder ante los independentistas catalanes. Fue tarea fácil, pues hay otros puntos clave como la reforma del delito de malversación que no han sido tan conflictivos como sí lo han sido otros en boca de Esquerra Republicana de Catalunya. El resumen del mensaje que lanzan desde Ferraz es muy sencillo: Emiliano García-Page pierde apoyos y el Gobierno gana adeptos. Y Javier Lambán es la cara de esta publicidad de guerra.

El Gobierno ya contaba con que se pudiera complicar la vida interna en plena negociación de los Presupuestos Generales dada la presencia de ERC, del PNV y de Unidas Podemos. La buena noticia es que los morados no han sido un foco de conflicto a excepción de la ley del sí es sí, que sí que ha generado críticas, pero que ha conseguido colocar los focos en el Ministerio de Igualdad. Al margen de esto, el control de daños es beneficioso para el PSOE, eso sin tener en cuenta la imposibilidad de controlar a Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha. Por lo demás, parece que todo está bien enfocado a falta de uno o dos flecos sueltos.