Las galletas de jengibre son un dulce navideño muy típico en algunas regiones de Europa. En España no son tradición, pero poco a poco se van incorporando a nuestro surtido propio de dulces, como los turrones y los polvorones. Lo divertido de estas galletas es que se pueden preparar fácilmente en casa y darles la forma que queramos con un molde o recortando con un cuchillo. Pueden hacerse en forma de abeto, de casita, estrella, corazón, muñeco de nieve, etc. Aunque la figura antropomorfa es la que más popular se ha hecho.
1EL ORIGEN DE LAS GALLETAS DE JENGIBRE
Esto debe a la Reina Isabel I de Inglaterra, que reinó en el siglo XVI. Se dice una Navidad pidió a sus cocineros que preparasen sus galletas con la forma de algunos de los miembros de la corte. Después de darles forma de figura humana, se decoraban con atuendos comestibles y se les ofrecía a los invitados. Y desde entonces las galletas de jengibre por excelencia tienen forma de monigote. Este año te animamos prepararlas en casa, porque además de pasar un rato muy entretenido, el resultado es una verdadera delicia. Además, dejan un aroma en casa indescriptible después de hornearlas. Son más fáciles de hacer de lo que parece y la clave está en la mezcla de especias. Este es el paso a paso.
