Las autoridades del gobierno de la Comunidad de Madrid está intentando resolver la situación de tensión que se inició con el comité de la huelga de médicos y pediatras que iniciaron una encerrona en el edificio de la Consejería de Sanidad, ubicado en la calle Sagasta de la capital española, sin que tenga que intervenir la policía, para detener a los manifestantes.
De manera extraoficial se supo que los uniformados habían llegado al lugar, enviados por una delegación del Gobierno central al edificio donde se encuentran atrincherados los médicos que en medio de un receso en las negociaciones decidieron encerrarse en una de las salas del edificio, para solicitar un interlocutor que ayudara a destrancar las negociaciones con las autoridades de la Comunidad de Madrid.
Esta huelga de médicos y pediatras se inició el pasado 21 de noviembre por la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) quienes demandan una serie de reivindicaciones laborales para los médicos de los centros de salud públicos de la capital española y ahora toma un nuevo rumbo con la decisión que han tomado de radicalizar la protesta y encerrarse, acción que se ha replicado en otros centros de salud de Madrid, donde otros médicos han decidido que también se encerrarán para apoyar a sus compañeros.
Durante todos los días de negociaciones los miembros de los sindicatos han señalado que las propuestas planteadas por las autoridades de la Consejería de Sanidad han sido insuficientes, hasta la tarde de este jueves, que decidieron solicitar la intervención de un interlocutor que fuera validado por ellos para continuar con las negociaciones.
En las redes sociales fueron múltiples las críticas que se hicieron en torno al documento que se filtró sobre las exigencias del comité de huelga atrincherado, donde se podía leer entre otras cosas que pedían que les hicieran llegar frutas al edificio de la Secretaría de Sanidad, de hecho, entre los propios funcionarios del gobierno madrileño, que con sorna comentaban entre ellos que los médicos pensaban que se trataba de una película de secuestradores de banco, por la manera en que estaban haciendo diversas exigencias a las autoridades.
Además, se dio la orden de que, a propósito de una actuación unilateral de un vigilante, que cortó una cuerda que estaba siendo utilizada por los sindicalistas que se atrincheraron en el edificio, que a partir de ahora, todos los paquetes que entren al edificio deben ser minuciosamente revisados para evitar que se introdujeran al recinto navajillas, tijeras o cualquier tipo de implementos que pudiesen resultar peligrosos.
En total son 10 los miembros del sindicato de médicos que se atrincheraron en la dirección de Recursos Humanos de la Secretaría de Sanidad de la Comunidad de Madrid y advierten que permanecerán allí hasta que designen a un mediador que sea validado por ellos para continuar las negociaciones en pro de lograr los beneficios laborales que llevan discutiendo desde hace por lo menos 25 días.
Estas personas ya pasaron la primera noche dentro del edificio. La policía, que inicialmente había llegado a los alrededores, se retiró y en cambio se concentraron otros médicos en respaldo a los que se encuentran encerrados, a quienes les hicieron llegar comida y otros objetos, para que puedan soportar la jornada, que este viernes cumplirá sus primeras 24 horas y que no saben cuánto más podría prolongarse.
Hace un par de días el propio Colegio de Médicos de Madrid había sugerido que se terminara el llamado a huelga, pero los miembros de AMYTS advirtieron que no cederían a las presiones de las instituciones hasta que lograran las reivindicaciones que están exigiendo, que consideran necesarias para lograr que exigen.
Desde el Colegio de Médicos habían señalado que los miembros del sindicato que estaban convocando la huelga no son suficientes ni contundentes, por lo que esta podría haber sido la razón por la que tomaron la decisión de encerrarse en el edificio, en medio de un receso en las conversaciones, donde aprovecharon la oportunidad para informar que no iban a salir del edificio ni a sentarse a negociar hasta que consiguieran la designación del interlocutor que ellos consideren que es el indicado para conseguir sus demandas.
La reunión se había iniciado el jueves a las 11 am fue después de la 1:30 pm cuando se suspendió por un momento, para la hora de la comida, cuando los médicos dieron la información de que no pensaban salir del edificio. Esta situación generó nerviosismo entre las autoridades de la Comunidad de Madrid que estaban designados para continuar las conversaciones que esperan destrabar el llamado a huelga y llegar a acuerdos con los médicos involucrados en la protesta que mantienen desde hace 25 días.
