¡Qué madre o padre no desea tener unas buenas fotos de su bebé! Muchos intentan sacar fotos desde diferentes ángulos y en distintos momentos del día… pero no salen bien. Aquí te traemos 6 trucos para conseguir unas fotos bonitas con cualquier tipo de cámara. Aunque no debemos olvidarnos de vestirlo con ropa de bebé adecuada y fotografiarlo en sus momentos tranquilos.
Para conseguir las mejores fotos también debemos prestar atención a la luz, al encuadre y a sus gestos y expresiones. La naturalidad de las fotografías es otro punto a tener en cuenta. Huye del flash si es posible. A continuación, te contaremos algunos trucos. ¡Con ellos tus fotos quedarán espectaculares! Y serán ideales para colgar en la pared.
Escoge un buen fondo
Nuestro bebé puede salir muy favorecido en la foto, pero… ¿y el fondo? Si este no es bonito habremos estropeado la imagen. No todo tiene que estar perfecto, eso es imposible, pero sí bien preparado. ¿Hay objetos al lado y/o detrás del bebé? Entonces, acuérdate de retirar todos antes de disparar la cámara. Los fondos sencillos y monocolores son excelentes. Y harán que el bebé destaque sobre ellos.
La ropa de bebé debe ser adecuada
Los fotógrafos profesionales analizan todos los detalles, incluyendo la vestimenta del niño. Los tonos suaves y alegres son los más adecuados para las fotos, ya que resaltan el rostro del bebé. Y no roban protagonismo a su carita, a diferencia de la ropa de bebé de colores llamativos o con diseños estampados.
Colócate a la misma altura que el niño
Estas fotos son las más bonitas. Generalmente los padres sacan las fotos desde su posición, lo cual no queda bien. Es como si nosotros mismos tenemos todas nuestras fotos desde una perspectiva cenital superior a la nuestra. Si el niño está sentado en el suelo o caminando, podemos agacharnos hasta llegar a su altura. Incluso podemos tumbarnos a su lado.
Siempre opta por la luz natural
La luz natural es la gran aliada para conseguir buenas fotografías. Se recomienda evitar la luz fuerte del mediodía. Opta por otras horas más suaves, como las primeras horas de la mañana. También evita las fotos a contraluz y a las que el bebé le dé el sol directo. Ya que le molestará y cerrará sus ojos. Lo más aconsejable es hacer las fotografías cerca de una ventana.
Experimenta con fotografías creativas
El bebé enrollado en una sábana o divirtiéndose con un juego de pompas quedará sensacional. También dentro de cestas o al lado de peluches de tamaño similar a él. Prueba a sacarle fotos desde diferentes ángulos para ver cuál te gusta más. Es importante hablarle al bebé cada tanto para que esté tranquilo y para que no nos dé la espalda.
Los posados no son necesarios
En las fotografías de bebé lo más valioso es la naturalidad. Los momentos divertidos y cotidianos son los más entrañables. Y seguro que estas imágenes pronto se convertirán en tus fotografías preferidas. Plasma sus gestos y sus expresiones. Ten en cuenta que estos variarán durante su crecimiento, y así las podrás inmortalizar para siempre.