El Gobierno esconde «bajo la alfombra» a Podemos para no truncar su buena relación con Marruecos

El Gobierno que lidera Pedro Sánchez quiere aprovechar el buen momento que atraviesa la relación entre España y Marruecos para reforzar y estrechar los lazos diplomáticos. Por este motivo han acordado llevar a cabo la XII Reunión de Alto Nivel tendrá lugar en Rabat los días 1 y​ 2 de febrero a la que acudirá gran parte de los ministros del Ejecutivo. Sin embargo, hay una parte de los políticos del Ejecutivo que se quedarán en tierra española y no asistirán a la cita. Se trata de los ministros de Unidas Podemos, es decir, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; a la titular de Igualdad, Irene Montero; la de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra; y al ministro de Consumo, Alberto Garzón. Las posiciones de estos políticos respecto a la soberanía del Sáhara Occidental, así como lo relacionados con Marruecos, podría truncas la situación diplomática actual entre ambos países y Pedro Sánchez no está dispuesto a que esto ocurra.

La agenda internacional del presidente del Gobierno ya tiene su primera cita marcada. El encuentro con Marruecos será una prueba más de la buena relación que mantienen actualmente ambos países. Se trata de toda una línea de fuego con la que reforzar el acercamiento entre España y el país marroquí. Un punto de entendimiento que le ha costado a Pedro Sánchez varias concesiones como aceptar la soberanía de Marruecos respecto al Sáhara Occidental, lo que supuesto un antes y un después en su relación diplomática. Así, como las distintas ayudas que el Gobierno ha dirigido a este país, ya que en varios Consejos de Ministros se han aprobado subvenciones con destino a Rabat.

España y Marruecos han acordado que la XII Reunión de Alto Nivel tendrá lugar en Rabat los días 1 y​ 2 de febrero

Sin embargo, hay una parte del Ejecutivo que no está tan de acuerdo con las decisiones que ha tomado Pedro Sánchez. Los ministros de Unidas Podemos no han dejado de denunciar todas y cada una de las medidas que el presidente ha tomado en favor de Marruecos. Pero, sobre todo, la soberanía del Sáhara elevó las fricciones entre los socios de Gobierno. Esta posición ha puesto una crisis entre las dos formaciones, una más, dado que los de la formación morada rechazaron en diferentes ocasiones este movimiento. La idea que el partido que dirige Ione Belarra respecto a Marruecos han propiciado que ninguno de los ministros morados vaya a asistir a la XII Reunión de Alto Nivel.

Ni Ione Belarra, ni Irene Montero ni Alberto Garzón acudirán a este encuentro, según han informado sus respectivos departamento. Ninguno de estos políticos viajará a Rabat para asistir a esta reunión. Quien tampoco integrará la delegación española que acompañará a Pedro Sánchez en este viaje será la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Y es que, la presencia de estos políticos en la Reunión de Alto Nivel podría tirar por la borda la buena relación diplomática que actualmente existe entre España y Marruecos y el líder del Ejecutivo no está dispuesto a ello. Así, ha decidido esconderlos «bajo la alfombra» y trasladarse al país marroquí rodeado de una decena de ministros de su confianza. Con el fin de seguir acercando posturas entre los dos terriorios.

Y es que, tal son los lazos que mantienen actualmente que incluso el Gobierno está barajando la posibilidad de llevar a cabo una cosoberanía de Ceuta y Melilla con Marruecos, es decir, que se ha puesto sobre la mesa la posibilidad de una soberanía compartida con el país vecino. Algo que le ayudaría con uno de los principales quebraderos del Ejecutivo respecto a estos territorios, la migración. El control de fronteras se ha convertido en todo un problema para España y la cooperación junto a las autoridades marroquís para frenar los continuos intentos de traspasar las frontera a territorio español han hecho que se plantee esta posibilidad.

TAL ES LA BUENA RELACIÓN CON MARRUECOS QUE EL GOBIERNO SE PLANTEA LA COSOBERANÍA DE CEUTA Y MELILLA ENTRE AMBOS PAÍSES

Hasta ahora parecía una quimera. Pero a medida que avanzan las relaciones diplomáticas con Marruecos, son cada vez más los que deslizan que el Gobierno ha puesto sobre la mesa la idea de que la soberanía de Ceuta y Melilla podría compartirse con el país vecino. Desde el Ejecutivo lo niegan. Y las fuentes del Gobierno consultadas insisten en que es algo que el POE no se ha planteado. No a corto plazo, al menos. El problema es que en el CNI y otros sectores de la policía aseguran cada vez con más fuerza que la cosoberanía de Ceuta y Melilla con Marruecos se ha puesto encima de la mesa en más de una ocasión. Los hay que aseguran que ya se ha firmado un pacto para llevarlo a cabo, pero los más prudentes solo aseguran que para el Gobierno siempre ha sido una posible moneda de cambio de la que disponer si merece la pena.