Se acercan las festividades navideñas, y Raquel Sánchez, desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, ya prepara la tradicional cesta de Navidad para sus empleados. En concreto, para los trabajadores de la Autoridad Portuaria de Santander. Eso sí, el departamento de la socialista parece estar buscando la forma de innovar esta tradicional costumbre, convirtiendo la cesta de Navidad de sus empleados en un «cheque-regalo» de 175 euros.
Tras más de dos años de pandemia, la Navidad parece regresar a España sin restricciones por el Covid-19, a pesar de que las cifras de contagio siguen acumulándose en algunos puntos del país. Unas celebraciones en las que regresan, no sólo las reuniones familiares, sino también las comidas y cenas de empresa. También la conocida cesta de Navidad, uno de los «regalos navideños» más esperados por los trabajadores junto a la paga extraordinaria, para aquellos que la conserven.
Un momento que ha sido aprovechado por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, bajo la gestión de Raquel Sánchez, para «innovar» en las celebraciones navideñas. Y, en concreto, en la cesta de Navidad del personal del Puerto de Santander, dependiente del Ministerio de la socialista.
UNA CESTA DE NAVIDAD EN FORMA DE CHEQUE
Así pues, el Puerto de Santander otorgará a sus trabajadores su cesta de Navidad en un formato muy distinto al tradicional: un «vale de carácter económico y nominativo por valor de 175 euros por empleado», tal y como destacan los documentos oficiales.
«Tradicionalmente, la Autoridad Portuaria de Santander viene suministrando una cesta de Navidad a los trabajadores que integran su plantilla» señalan desde el departamento económico-financiero. Una cesta que, «en reunión con representante del comité de empresa se acordó […] que pasaría a ser un vale de carácter económico y nominativo por valor de 175 euros por empleado».
Un vale que estará destinado, según la información oficial, a que los trabajadores de Santander puedan «escoger», entre los productos ofrecidos por la empresa adjudicataria, el contenido de su propia cesta de Navidad. Una empresa que, tal y como se destaca, deberá ser accesible para estos empleados. «Los licitadores deberán ser establecimientos del sector de la alimentación, que dispongan al menos de un establecimiento físico ubicado en Santander y que sea accesible en transporte público urbano (autobús)».
Así pues, a través de estos cheques de cerca de 200 euros, los trabajadores de la Autoridad Portuaria de Santander podrán elegir entre diversos y selectos productos para su cesta de Navidad, todos ellos contemplados en las características del contrato establecido por el Ministerio de Transportes.
En concreto, la cesta de Navidad podrá contener vino de Rioja, Ribera del Duero, crianza (de al menos tres marcas), así como vino blanco de denominación verdejo y albariño. También incluirá «embutidos ibéricos cortados y envasados al vacío», «turrones calidad suprema», queso curado de oveja, y diversas conservas. Eso sí, todos estos productos estarán disponibles en varias marcas, siendo los propios trabajadores los que puedan escoger la composición de sus cestas de navidad, con un precio máximo de 175 euros, a gastar en un máximo de un año de plazo desde la adquisición del vale emitido por el Ministerio.
Peculiar «regalo navideño» gestionado por el departamento de Raquel Sánchez que costará a las arcas públicas del estado un total de 23.275 euros, IVA incluido, ya que, tal y como destacan los documentos oficiales, se establecerá un total de «121 vales nominativos a entregar», según los datos aportados por el departamento de Recursos Humanos de la propia Autoridad Portuaria.
LA MONCLOA TAMBIÉN «INNOVABA» EN 2021
Una peculiar cesta de Navidad de Raquel Sánchez que, sin embargo, no ha sido la única modificación que han experimentado estos regalos navideños por parte del Estado en los últimos años. No especialmente debido a la pandemia del coronavirus, sino por las aparentes ganas de «innovar» de algunos organismos de la administración pública española.
Es el caso del propio Gobierno de España que, en la celebración de las festividades navideñas de 2021, decidía aportar su «granito de arena» para modernizar esta tradición, sorprendiendo a muchos con el cambio propuesto en las cestas de navidad de los trabajadores del Gabinete de Presidencia del Gobierno.
Así pues, ante la sorpresa y decepción de muchos, la Moncloa decidía regalar por Navidad a sus empleados unas baterías portátiles para móviles, aprovechando el contexto de la crisis energética que ya se dejaba sentir a finales del año pasado. Una desagradable sorpresa que muchos tildaban de «inútiles» e inservibles para gran parte de los trabajadores de Presidencia, que sin duda, echaban de menos el tradicional jamón ibérico o el queso curado, que sí estarán presentes en la cesta propuesta por el Ministerio de Transportes, aunque no llegarán de la forma «tradicional» a las manos de los trabajadores de la Autoridad Portuaria de Santander, que tendrán que hacer un «trabajo extra» para ganarse su cesta de Navidad en este 2022.
