Irene Montero se niega a tocar su ley para no verse «débil» a la hora de negociar con Yolanda Díaz

La ministra de Igualdad, Irene Montero, se mantiene en sus trece y se niega a revisar cualqueir pequeño apartado de la ley del solo sí es sí. Está enrocada porque considera que a nivel interno sería un «desastre» reconocer que se cometieron errores de cara a las elecciones y sobretodo de cara a la reestructuración de la izquierda. Fuentes de Podemos dejan claro que Montero considera que una cesión en este punto podría suponer nada menos que perjudicar su posición de fuerza a la hora de negociar de tú a tú con Yolanda Díaz.

Que Irene Montero sigue enrocada para mantenerse fuerte en la negociación y el pulso con Yolanda Díaz no es un secreto. Ahora mismo, reconocer que la ley que llevó a cabo fue un fracaso o que estaba mal redactada podría, a sus ojos, debilitarle de cara a la negociación que debería tomar con Díaz. La ministra de Trabajo no quiere dar su brazo a torcer a la hora de asumir en su equipo a perfiles como el de Irene Montero, tal y como han comentado fuentes de su entorno a MONCLOA.com. Sin embargo, la ministra de Igualdad tiene meridianamente claro que tendrá posibilidades serias de meterse en las listas.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, no ha entrado a valorar las críticas que varias figuras de la izquierda, como la exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena o la candidata a la misma alcaldía por Más Madrid, Rita Maestre, han vertido sobre la negativa del Ministerio a modificar la Ley del ‘solo sí es sí’. Montero ha insistido en que se trata de una norma «sólida».

Preguntada por estas opiniones durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Crisis por los últimos asesinatos machistas, la ministra ha asegurado que no haría valoración de las mismas, aunque ha apuntado que quienes critican que no se reforme la ley también admiten que es «sólida» y que «es necesario» el marco de protección que incluye.

«Lógicamente compartimos la preocupación que tiene la sociedad por esas decisiones judiciales de rebajas de penas que no corresponden con el decreto de la Fiscalía, ni con el espíritu y la voluntad del legislador», ha apuntado Montero en su respuesta.

Además, ha indicado que ante esa preocupación, su Ministerio está ocupado en llevar a cabo «todo lo que esté en su mano» para «garantizar la correcta aplicación de la ley». «Y así seguirá siendo», ha concluido.

Por su parte, la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha señalado que en «este momento inicial» en el que la ley se está «interpretando de forma tan diversa por parte de diferentes audiencias, tribunales superiores de justicia y órganos judiciales», sería buena la ampliación de competencias de los juzgados de violencia contra la mujer a la violencia sexual.

A su juicio, «sería bueno» que estos casos «se encontraran al menos en fase de recurso con una Fiscalía especializada y que conoce al dedillo la Ley del ‘solo sí es sí'», según ha declarado. Esta ampliación de competencias de los juzgados de violencia contra la mujer se recoge, precisamente, en dicho texto.