La ley del aborto da un paso más en el Senado y lo blinda frente a medidas como la de Castilla y León

La Comisión de Igualdad en el Senado ha aprobado este miércoles el informe de la ponencia del proyecto de ley por el que se modifica la ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo, y ha introducido con el apoyo de todos los grupos una enmienda para blindar el aborto frente a iniciativas como la propuesta antiabortista de la Junta de Castilla y León.

Así, la ley incorpora una transaccional del PSOE sobre una enmienda de Más Madrid al texto procedente del Congreso, de forma que queda blindado el derecho de las mujeres a la interrupción voluntaria del embarazo.

Con la transaccional, la ley recogerá en su artículo 24 la responsabilidad institucional, de forma que las administraciones se abstengan de «cualquier acto que vulnere los derechos sexuales y reproductivos establecidos en esta ley orgánica». Además, se deberán asegurar de que «autoridades, personal funcionario, agentes e instituciones estatales y autonómicas, así como los demás actores que actúen en nombre de las anteriores se comporten de acuerdo con esta obligación».

Asimismo, en su apartado 2, el artículo recoge que las administraciones «garantizarán el libre ejercicio del derecho a la interrupción del embarazo en los términos de esta ley y, especialmente, velarán por evitar que la solicitante sea destinataria de prácticas que pretendan alterar, ya sea para afianzar, revocar o para demorar, la formación de su voluntad sobre la interrupción o no de su embarazo, la comunicación de su decisión y la puesta en práctica de la misma, con la excepción de la información clínica imprescindible y pertinente».

Igualmente, la enmienda añade que «las intervenciones diagnósticas y terapéuticas asociadas con la decisión y la práctica de la interrupción del embarazo deberán basarse, en todo caso, en la evidencia científica», y que las administraciones «tomarán las medidas integrales y eficaces para prevenir, proteger, investigar, sancionar, erradicar y reparar las vulneraciones de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres».

La reforma dictaminada este miércoles ha contado con el apoyo del PSOE, Esquerra Republicana, Junts, PNV; el voto en contra de PP y la abstención de Geroa Bai y Teruel Existe. En total, ha salido adelante con 16 votos a favor, 12 en contra y 2 abstenciones, y pasa al Pleno del Senado que se celebrará la próxima semana.

Además, han sido rechazados en Comisión los vetos que PP y VOX habían presentado al texto, con 12 votos a favor y 18 en contra. Por otro lado, no se han votado las 186 enmiendas registradas a su paso por la Cámara Alta, que irán vivas al Pleno.

«Nuevamente presentan las derechas al unísono, como buenos socios de Gobierno, sendos vetos a una ampliación de derechos. Vemos la esencia del Partido Popular ante cualquier avance en derechos. A las mujeres hay que tutelarlas, las mujeres no pueden decidir solas y cualquier avance en sus derechos, lo vetamos, en vez de hacer una propuesta constructiva», ha criticado la portavoz del PSOE en la Comisión de Igualdad, Donelia Roldán.

La senadora socialista ha preguntado a los ‘populares’ si «no les da pudor» presentar este veto y les ha recordado que «los tiempos en blanco y negro ya pasaron». «Basta de tutelar a las mujeres», ha pedido.

Además, la senadora socialista María Esther Carmona ha puesto de relieve una enmienda transaccional presentada por su partido con la que quieren blindar el derecho de las mujeres a la interrupción del embarazo frente a medidas como las anunciadas por la Junta de Castilla y León.

«Quiero destacar una de ellas, la propuesta de nuestro partido para evitar protocolos como el de la comunidad de Castilla y León frente a la intención de institucionalizar el acoso que antes se llevaba a cabo a las puertas de las clínicas que hoy, señorías, recordemos que por fin es un delito. El PSOE, con la mayoría de esta Cámara, garantizamos que nadie coaccione a las mujeres para decidir qué hacer o que no hacer en cuanto a su embarazo», ha enfatizado.

Por su parte, el senador del PP Antonio Román ha tachado la reforma de la ley del aborto de «innecesaria, inoportuna y precipitada» y ha negado que su grupo quiera tutelar a las mujeres. «Dicen que queremos tutelar a las mujeres, todo es mentira, es falso. Lo que queremos es consensuar una ley que afecta a todas las personas, hombres y mujeres», ha explicado Román.

Por ello, su grupo ha presentado 75 enmiendas con las que pretenden, entre otros cambios, eliminar el acceso al aborto sin consentimiento paterno a menores de 16 y 17 años, recuperar el periodo de reflexión de tres días y suprimir el registro de profesionales objetores.

Además, ha aprovechado para afear al PSOE las rebajas de penas a agresores sexuales como consecuencia de la Ley del ‘solo sí es sí’, un texto que la también senadora del PP Patricia Rodríguez Calleja ha calificado de «capricho» de la ministra de Igualdad, Irene Montero.

«Ya nos gustaría, señorías, que hubieran actuado al menos con la misma diligencia y rapidez para modificar la chapuza de la Ley del solo sí es sí para que, al menos, los delincuentes sexuales que cometan una agresión, un delito, hoy tengan las mismas condenas que con la ley anterior, pero eso a la ministra ni a ustedes parece que les urja tanto», ha lamentado Rodríguez Calleja.

SACAR DEL TEXTO LA GESTACIÓN SUBROGADA

Por otro lado, varios grupos han coincidido en la necesidad de sacar del texto de la ley del aborto cualquier referencia a la gestación subrogada ya que consideran que este tema precisa una reflexión aparte.

«Estamos acostumbrados a que desde el Gobierno nos metan de rondón muchas cosas en las leyes y, desde luego, en esta nos han metido todo el tema de la gestación subrogada o gestación por sustitución», ha lamentado el senador de Geroa Bai Koldo Martínez, al tiempo que ha propuesto que se aborde en una norma independiente, como ocurre en otros países.

En la misma línea, la senadora de Junts María Teresa Rivero Segalàs ha avanzado que van a votar en contra de cualquier enmienda o cualquier referencia a la gestación subrogada, porque consideran que el debate respecto de esta práctica se debe «afrontar con escucha, con información, con coraje, porque es un tema muy complejo que afecta a derechos de las personas».

Además, entre otras enmiendas que ha presentado Junts, Segalàs ha hecho hincapié en una que pide aumentar de 3 días a 6 meses el plazo para la inscripción del nacimiento en el registro para que la madre tenga tiempo de recuperarse del parto y pueda manifestarse sobre el orden de los apellidos. De esta forma, según ha advertido, se podría evitar que se usen «de forma fraudulenta» para después poder justificar el cambio.

Desde el PNV, la senadora María Dolores Etxano ha anunciado que votarán a favor de aquellas enmiendas que propongan eliminar del texto las referencias a la gestación subrogada; y, en general, sobre el texto de la ley, ha aplaudido que se eliminen requisitos para abortar «cuya finalidad no era otra que intentar disuadir a las mujeres».

Entre los cambios que introduce la ley, la senadora de Esquerra Republicana Sara Bailac ha destacado la supresión de los tres días de reflexión que hasta ahora eran preceptivos para abortar. «Como si las mujeres, cuando tomamos una decisión tan importante y acudimos a un centro sanitario, no fuéramos reflexionadas de casa», ha apuntado. También ha planteado algunos retos que, a su juicio, quedan por delante como «el reconocimiento y la importancia de nombrar las cosas por su nombre» como «la violencia obstétrica» o el reconocimiento del «duelo gestacional».