Esto no iba a quedar así. El exsecretario general del Partido Popular Teodoro García Egea ha empezado su venganza y no parará hasta señalar a cada uno de los «traidores» que apoyaron en su momento a Pablo Casado cuando éste estaba en plena guerra contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y que luego le apuñalaron por la espalda tan pronto vieron su caída. Teodoro García Egea no lo hace por Casado. Lo hace porque está visiblemente enfadado con todos los «palmeros» que apoyaron al líder del PP en su cruzada contra Ayuso para luego darle la espalda. La buena noticia para la expresidenta del Congreso Ana Pastor es que ella está fuera de la lista. Al menos de momento.
La también exministra de Sanidad Ana Pastor estaba en la primera línea política mucho antes que Pablo Casado llegara al liderazgo del PP. De hecho, ella fue una de las pocas que ayudó al presidente del partido a adecuarse a las nuevas circunstancias. Todo esto la convierte en una popular clave que, pese a que ha sobrevivido a Casado y ahora está con Alberto Núñez Feijoo, está fuera del radar de Teodoro García Egea, quien busca vengarse de todos y cada uno de los «palmeros» que aplaudieron a Casado para luego apuñalarle. Javier Maroto, Cuca Gamarra o Andrea Levy son algunos de los ejemplos más claros de este perfil que ahora persigue con virulencia el exsecretario general del PP. Se lo ha tomado con mucha más calma de la esperada, pero todo llega.
En el Partido Popular tienen claro que es Teodoro García Egea quien está detrás de las últimas noticias que se han dejado ver. Los famosos Whatsapp de ánimo a Pablo Casado han llegado incluso al Senado. Y que Feijoo no haya tomado cartas en el asunto ha dado aún más alas a Teodoro García Egea para seguir urdiendo su venganza contra todos aquellos que «traicionaron» a Pablo Casado en cuanto le vieron débil. La propia secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha asegurado que dijeron lo que tenían que decir y que hicieron lo que tenían que hacer, pero esto no ha tranquilizado los ánimos en el entorno de Feijoo; quien ya sabía, por cierto, de la existencia de estos mensajes, según fuentes de Génova.
Ahora mismo, perfiles como el de Andrea Levy o el de Javier Maroto están en una posición realmente complicada, pero Ana Pastor, pese a que aún tiene enemigos en el partido, está fuera de esta venganza. Desde el entorno de la expresidenta del Congreso no se sorprenden porque «Ana estaba en política desde mucho antes que Casado», pero lo cierto es que hay cierta tensión también entre los suyos porque no saben por dónde puede salir Teodoro García Egea en estos momentos. Varios dirigentes del Partido Popular intentaron truncar su supervivencia política con la llegada de Alberto Núñez Feijoo, pero finalmente no lo han conseguido. Ahora estas mismas voces esperan que Teodoro García Egea pulse el botón rojo, pero no llega ese momento.
Teodoro no parará. No al menos mientras tenga material para erosionar la imagen de quienes considera que le traicionaron. El más señalado es Javier Maroto, a quien consintieron que se empadronara en Sotosalbos para sobrevivir en la política y quien ha sido el mayor de los «desagradecidos», a sus ojos, una vez Casado ha caído en desgracia. Pero hay más. La buena noticia para Ana Pastor es que no solo ha sido comedida, sino que la han dejado fuera de estas intrigas.