Hasta 2015 era ilegal bailar en Japón tras la media noche.

El cartel de ‘No dancing’ o ‘No bailar’, en castellano, presidía en las pistas de baile de la mayoría de locales de ocio de Japón. La policía temía que favoreciera a «una atmósfera excesivamente hedonista». 

Sin embargo, la aplicación de la norma se relajó considerablemente a partir de los años 1960, lo que permitió la proliferación de estos locales. No obstante, en 2010 después de un gran altercado debido a una pelea en un club de Osaka se volvió a la prohibición total y de mano dura.