El pulpo a la gallega es plato típico de nuestra gastronomía que triunfa allá donde va. Es un gran atractivo culinario que si sabes hacer bien tendrás mucho ganado en el mundo de la cocina. No todos lo consiguen, puesto que hallar el punto exacto en el que el pulpo no es ni muy duro ni muy blando no es fácil. Hoy venimos a contarte cómo lograr que quede en ese punto ¡pero de verdad!
8Cómo preparar el acompañamiento del pulpo a la gallega
Estamos dejando que el pulpo a la gallega se airee y vamos preparando la guarnición. Ponemos a hervir una olla con sal y cuando empiece el hervor agregamos las patatas con cáscara bien lavadas con un cepillo. Sabrás que están listas si las pinchas con una brocheta y ya están tiernas. Deberán estar más o menos tiempo de acuerdo a su tamaño como sucede en el caso del pulpo. Cuando ya están, dejamos que se enfríen un poco, pelamos y cortamos en rodajas para poner al lado del pulpo para servir.
