El presidente del Partido Popular no quiere más palos en las ruedas. A nivel nacional es otro cantar, pero a nivel municipal el caos puede ser tan grave que haga colapsar más de un potencial gobierno popular por los próximos cuatro años. Fuentes de Génova han dejado claro que el grupo de Whatsapp de seis que tiene las riendas del Partido Popular han acordado dar luz verde a los alcaldes para que lleguen a todos los acuerdos necesarios con Vox pese a que los pactos entre Alfonso Fernández Mañueco, presidente de Castilla y León, y Juan García- Gallardo, vicepresidente de la Junta, estén «irritando» más de la cuenta a Génova. Con esta realidad, los candidatos del PP respiran por primera vez tranquilos porque saben que se han cerrado puertas con la izquierda.
El problema se ha solucionado al menos de cara a las municipales e incluso las autonómicas. Es cierto que Génova ha dado luz verde bajo manga a todos los alcaldes de las ciudades más importantes. De los municipios pequeños, Génova nos e preocupa. Aún así, el llegar a acuerdos puntuales con Vox es clave para que tengan la manga ancha suficiente como para gobernar en muchas de las ciudades. Esto forma parte de una estrategia electoral más grande que pasa por dar el primer golpe en las elecciones de mayo para así después lanzar el mensaje de que el Partido Popular ha dado el primer paso para arrebatar el poder al PSOE. Vox es clave para llegar a gobernar y, pese a lo ocurrido en Castilla y León, lo cierto es que los seis de Génova han dado luz verde.
El grupo de Whatsapp que consta de seis personas (Marta Varela, Marcos Gómez, Mar Sánchez, Luis de la Matta y Álvaro Pérez, además del propio Alberto Núñez Feijoo) es el que ha urdido la estrategia. Todos se dan palmaditas en la espalda porque los sondeos son muy favorables, pero quieren algo más. El equipo de Feijoo está obsesionado con teñir de azul el mapa en las municipales y autonómicas. Es cierto que Alfonso Fernández Mañuezo ha empañado la doctrina popular por pactar más de la cuenta con un Juan García-Gallardo que se ha aferrado a muchas medidas polémicas, pero también lo es que el PP quiere llegar a las generales con el mapa de color azul para generar dudas en el PSOE. La mala noticia que barajan en el PP es la falta de cintura: o sacan mayoría absoluta o tienen que echarse en brazos de un Santiago Abascal que exigirá sí o sí ministerios y alguna que otra vicepresidencia.
El PP ha dado un balón de oxígeno en todas las ciudades en las que tendrían mayoría relativa. Hablamos de todas las ciudades grandes de provincia del país que tienen una realidad política que les exige pactar con Vox de todas todas. Con este cuadro, los candidatos municipales tipo José Luis Martínez-Almeida se ven con más opciones y con más capacidad de movimiento a la hora de intentar conseguir la alcaldía. No hay que olvidar que el Gobierno ha conseguido poner a la izquierda en una dinámica de costumbre a la hora de pactar con cualquier otra formación. Pese a que el alcalde de Madrid tenga complicado poder llegar a un acuerdo con Vox, lo cierto es que el resto de las ciudades tienen la necesidad absoluta.
CANDIDATOS EL 21
Madrid, kilómetro cero de la campaña municipal del PP. Los candidatos elegidos por el equipo de Feijóo para las grandes ciudades se presentarán en un gran acto en Madrid el 21 de enero, según ha podido saber MONCLOA.COM. Pocos días antes, en el Comité Electoral Nacional, serán refrendados definitivamente los nombres de la campaña más importante a la que se enfrenta Feijóo desde que decidiera desembarcar en Madrid y dar el paso de presidir su partido.
Será una forma, también, de lanzar la campaña de José Luis Martínez-Almeida. Madrid, revalidar la alcaldía de la capital de España, es un punto de toque imprescindible para que estas elecciones sean un éxito para Alberto Núñez Feijóo. El presidente de los populares ha dicho que las municipales y autonómicas “van a ser un plebiscito” para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Ganar ese plebiscito supone recuperar grandes ciudades en manos de la izquierda y también dar la vuelta en parlamentos autonómicos, un reto bastante complicado.
Hacer un acto de esta envergadura en Madrid supone un espaldarazo al alcalde Almeida, que afronta una campaña en la que parte como favorito, pero en la que las encuestas dejan algunas incertidumbres sobre los pactos posibles. La primera, el papel que ya por esas fechas haya decidido tomar la vicealcaldesa, Begoña Villacís.
