La ministra de Sanidad, Carolina Darias, presidirá este viernes a las 10.00 horas su previsible último Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), que se celebrará en Palma de Mallorca, en el que se abordará, entre otras muchas medidas, la creación de la Red Estatal de Vigilancia en Salud Pública, que incorpora la vigilancia de enfermedades no transmisibles, como el cáncer, atendiendo a sus riesgos y determinantes.
Según ha informado el Ministerio de Sanidad, Darias será recibida a las 9.30 horas por la presidenta del Govern de Baleares y después se hará la foto de familia previa al inicio de la reunión del CISNS, que se celebrará en la Capilla del Consolat de Mar. A partir de las 14.00 horas, comparecerá en rueda de prensa, junto a la consejera de Salud y Consumo de Baleares, Patricia Gómez Picard, para informar sobre el extenso orden del día.
Será probablemente la última comparecencia pública de la ministra antes de dejar el cargo y concurrir a las elecciones de la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canarias, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara este miércoles que los cambios en el Ejecutivo, con la salida de Darias y la ministra de Industria, Reyes Maroto, se realizarán después de la moción de censura, es decir, después del miércoles de la semana que viene.
Para ‘despedirse’ de los consejeros autonómicos, el Consejo Interterritorial va a abordar una gran cantidad de materias, como la aprobación de la memoria de actividades del CISNS de 2022, la situación epidemiológica de la COVID-19, la distribución de fondos a la CCAA para formación continuada de los sanitarios, el Plan de Mejora de las Infraestructuras en Atención Primaria o información sobre Up To Date, una herramienta que se utiliza para la mejora de la calidad asistencial.
Otros puntos del orden del día son una propuesta de actuaciones para la evaluación de impacto de la huella climática del sector sanitario; las acciones del Plan de Acción de Atención Primaria en materia de Recursos Humanos; los criterios para la financiación del incremento de plazas de grado de Medicina en las universidades públicas; la situación actual del Registro Estatal de Profesionales Sanitarios; y el Informe de seguimiento de la Estrategia de Salud Digital, incluido el Plan de Atención Digital Personalizada.
Entre todos ellos sobresale el Proyecto de Real Decreto por el que se crea y regula la Red Estatal de Vigilancia en Salud Pública, que la ministra de Sanidad compartirá con las comunidades autónomas tras sacarlo a información y audiencia pública el 1 de febrero, y que debería ir en breve al Consejo de Ministros.
Según el texto, el decreto también creará y regulará los Laboratorios Nacionales de Referencia para Vigilancia en Salud Pública. Estos laboratorios serán designados en convocatorias competitivas en base a su «experiencia y competencia técnica y científica», así como otros criterios.
De esta forma, se establecerá el marco normativo en el que se desenvolverá la vigilancia de la salud pública en España en los próximos años. «La pandemia de COVID-19 ha puesto de manifiesto la necesidad de mejorar los sistemas de salud y de forma específica la vigilancia en salud pública», ha explicado el Ministerio de Sanidad en el documento.
Su principal novedad es que incorporará, además de la vigilancia de las enfermedades transmisibles, otros sistemas y fuentes de información necesarios para extender la vigilancia a todas las enfermedades y problemas de salud y a sus determinantes, como «factores sociales, económicos, laborales, culturales, alimentarios, biológicos y ambientales que influyen en la salud de las personas».
En concreto, serán cinco sistemas de vigilancia: Enfermedades No Transmisibles, que incluirá la vigilancia del cáncer; Enfermedades Transmisibles, incluyendo resistencias a los antimicrobianos e infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria; Salud Laboral; Salud Ambiental; y un Sistema de Alerta Precoz y Respuesta Rápida.
Del mismo modo, tiene por objeto desarrollar un sistema de alertas para disponer de capacidades e instrumentos que permitan la preparación y la respuesta del sistema sanitario ante amenazas para la salud humana, como puede ser una pandemia.
«Se pretende detectar precozmente las situaciones que puedan suponer una alerta o emergencia sanitaria, evaluando el riesgo para la salud pública y la efectividad de la respuesta adoptada para su control», detalla el texto.
Esta red tendrá un sistema de gobernanza propio, integrado por distintos mecanismos y unidades de gestión, tanto a nivel nacional como autonómico. Según el documento, habrá un órgano de coordinación designado por el Ministerio de Sanidad, y a nivel de cada comunidad autónoma y ciudades de Ceuta y Melilla a través de un órgano de coordinación autonómico designado por cada consejería competente en materia de sanidad.
Así, «la información fluirá del nivel autonómico al nodo central, con independencia de la necesaria difusión e intercambio de información que se realice dentro de cada ámbito territorial». En este sentido, este RD pretende «contribuir a armonizar el desarrollo de los sistemas de vigilancia entre las comunidades autónomas y ciudades con Estatuto de Autonomía y el nivel estatal». Se creará también un Comité de Gestión de la Red con el objetivo de «impulsar su gestión armonizada».
En cualquier caso, y tras este decreto, su funcionamiento será perfeccionado a través de la normativa de desarrollo y los protocolos de vigilancia, a fin de garantizar la actualización continua del sistema.
