Ione Belarra e Irene Montero evidencian su ruptura con Alberto Garzón al retirarle la palabra

La moción de censura ha sido una prueba más de que Alberto Garzón cada vez está más alejado del color morado. El ministro de Consumo ha protagonizado el divorcio con Unidas Podemos y, si quedaba alguna duda, el Congreso ha sido el último escenario que ha evidenciado esta cuestión, dado que las dos dirigentes de la formación morada, Ione Belarra e Irene Montero, no le han dirigido la palabra. Todo ello a pesar de que cuentan con asientos contiguos en la Cámara Baja. Se trata de una muestra más de que Alberto Garzón ya no tiene cabida en el partido que le ha permitido entrar en el Gobierno y llegar a su actual cargo al frente del departamento de Consumo. Y es que, el hecho de que este político no deje de acercarse a Yolanda Díaz es algo que no gusta a las líderes de Unidas Podemos y se lo están haciendo saber.

Todos los focos apuntaban hacia los mismos políticos, hacia los protagonistas de la moción de censura. En primer lugar, a Ramón Tamames, el candidato presentado por Vox para asumir la presidencia del Gobierno. Por otra parte, Pedro Sánchez, actual líder del Ejecutivo y político contra quien se ha presentado la medida. Y Santiago Abascal como líder de la formación de extrema derecha que ha presentado la moción de censura. Sin embargo, alejado de los focos ha habido movimientos que no han pasado desapercibidos, en concreto entre los miembros del Gobierno de que forman parte de Unidas Podemos. La líder de Unidas Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, y la titular de Igualdad, Irene Montero, se sientan juntas en el Congreso de los Diputados y a su lado se sitúa también Alberto Garzón, ministro de Consumo.

Esta cercanía dentro de la Cámara Baja les ha jugado una mala pasada. Las «amigas de la facul», como es habitual, han llegado al Congreso de los Diputados juntas, evidenciando la buena relación que mantienen. Sin embargo, esta cercanía no se puede extrapolar a Alberto Garzón, dado que no le han dedicado ni un saludo. Además, durante el tiempo que ha durado la moción de censura no han intercambiado ni una sola palabra Irene Montero e Ione Belarra con el titular de Consumo. Las líderes de la formación morada han dejado claro con sus acciones que la relación Unidas Podemos-Alberto Garzón está rota. Y ello implica que de cara a las próximas elecciones no tendrá un hueco en este partido.

Que el de Izquierda Unida se ha alejado del color morado es algo evidente, pero no lo ha hecho sin un plan B. Este político es un superviviente y pretende alargar su presencia en la vida política todo lo posible, dado que ello va acompañado de un sueldo público. Por ello, antes de alejarse de Unidas Podemos, se ha asegurado tener bien atado el siguiente paso, un movimiento que ha medido y analizado en profundidad antes de comenzar a trabajar en él. El político ha decidido apostar por Sumar, considera que Yolanda Díaz obtendrá unos buenos resultados electorales y por ello pretende cambiar de bando lo antes posible.

Así, desde hace tiempo, Alberto Garzón no ha dejado de «perseguir» a la ministra de Trabajo para conseguir un hueco dentro de su formación. El problema es que este acercamiento no ha sentado nada bien a los de Unidas Podemos, quienes le tienen cogida la matrícula desde que comenzó a llevar a cabo este tiempo de movimientos. Retirarle la palabra ha sido una muestra de ello, como se ha podido ver en el Congreso durante la moción de censura.

A ello se suma el hecho de que desde Unidas Podemos no dejan de «ponerle ojitos» a la vicepresidenta y ministra de Trabajo para que acepte ser la candidata morada o, por lo menos, para que Sumar y Unidas Podemos vayan de la mano a los comicios nacionales. Una cuestión sobre la que Yolanda Díaz se resiste a pronunciarse y todo porque en el partido que dirige Ione Belarra hay unos perfiles que no tienen cabida en Sumar, como el de Irene Montero o Pablo Echenique, lo que complica el acercamiento con Sumar. De momento, vigilan de acerca Alberto Garzón, dado que están sopesando llevar a cabo una idea en la que el de Izquierda Unida podría jugar un papel importante.

La idea inicial de Podemos es negociar la integración con Sumar y para ello necesitan la máxima fuerza posible y contar de inicio con Alberto Garzón para forzar que Yolanda Díaz dé el brazo a torcer y acceda a las demandas de Podemos. En el caso de no conseguir este objetivo, el ministra de Consumo y Unidas Podemos probablemente romperán de forma definitiva y los moradas cerrarán definitivamente la puerta a este político