Manuel Mariscal tiene que cambiar la estrategia a seguir con los medios de comunicación. En un principio, Vox entendía que era rentable para el partido a nivel electoral escenificar enfrentamientos y choques con los medios de comunicación. Sin embargo, desde que Santiago Abascal tuvo esa cena tan comentada con el exdirector de El País Juan Luis Cebrián, en el partido creen que es necesario tener la cobertura de algunos periódicos de cara a las elecciones. Las alarmas saltaron en el momento en el que los actos de Vox tenían poca repercusión. Ahora Vox quiere ponerle solución sentándose con todos los medios que consideran que pueden «pasar por el aro» y no darles más de la cuenta.
El partido de Santiago Abascal se ha molestado ahora en intentar «permitir» a los medios que consideran capaces de ser «amables» con la formación el acceder al presidente de Vox. No será raro que a partir de ahora Santiago Abascal se siente con más de un medio dado que Manuel Mariscal está abierto a ello. Desde Vox llevan tiempo intentando revertir una situación que parece insostenible porque lo que hace unos meses era rentable ya no parece serlo. Todo empezó con la cena de Santiago Abascal con Cebrián y con el hecho de que los periodistas ya no cubrían los eventos del partido. Ahora Manuel Mariscal y otros responsables de prensa se ven obligado a reconstruir los puentes con los medios. Y ya han empezado a ver si este año pueden conseguir algo más de cobertura.
La enemistad manifiesta entre el conocido periodista Federico Jiménez Losantos y Vox tampoco ha ayudado a que el partido venda la estrategia mediática que había seguido hasta ahora. Desde la formación son muchas las voces que entienden que esta idea que ha sido de las pocas que han comprado las dos facciones de Vox (tanto la ultraliberal como la falangista), no ha dado los frutos esperados. Meterse con La Sexta y con Jordi Évole es algo que en su momento dio cierta relevancia a la formación, pero el equipo de Santiago Abascal está deseando normalizar la relación con los medios más conservadores para tener cierta cobertura. Y más en un contexto en el que el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, arrasa en las encuestas y amenaza con robar una buena cantidad de votantes a Santiago Abascal.
Manuel Mariscal hasta ahora había arrancado una estrategia política basada en la confrontación contra los medios de comunicación. El responsable de la estrategia a seguir en redes sociales necesita dar un giro de 180 grados en su política porque así lo han determinado los cabezas pensantes de Vox. El problema de no tener ningún tipo de cobertura en los eventos de campaña con las encuestas en contra parece haber hecho mella en una formación que cae por segundos. Y más en las elecciones que tocan este 28 de mayo, autonómicas y municipales. Abascal ya ha conseguido sentarse con algún que otro medio afín para una entrevista que le dé visibilidad. Pero lo que cuentan fuentes del partido es que desde Vox ya no se plantean poder mejorar las encuestas con todos los medios vetando los eventos a seguir en lo que resta de primavera hasta las elecciones. Y eso sin entrar en las generales