Sin duda, el baño es uno de los ambientes más difíciles de limpiar dado que es un lugar en el que es fácil que se acumulen bacterias y además, todos los días. El motivo tiene que ver con el efecto limpiador que tiene la sal así como desatascador. Por otro lado, para que el truco o el efecto sea más efectivo se recomienda mezclar con un poco de bicarbonato y aceite esencial. De este modo, lograremos tener un retrete limpio, libre de bacterias y además, sin olores.