Margarita Robles contribuye con los saqueadores de Venezuela vistiendo unas gafas de sol de 40 euros

A la ministra de Defensa, Margarita Robles, el hecho de estar a la moda le resulta un aspecto importante, aunque ellos suponga contribuir con compañías de dudosa procedencia, cuyos empresarios son los responsables del saqueo de Venezuela, a través de la estatal venezolana Petróleos de Venezuela.

Robles fue captada por las cámaras de las agencias de noticias, esta semana, vistiendo unas gafas de sol de la marca NorthWeek, una de las marcas de la Start-up Hawkers, que se hizo famosa en España tras asumir entre sus inversores al venezolano Alejandro Betancourt, un «empresario» venezolano, vinculado con el régimen de Nicolás Maduro y conocido por ser uno de los «Bolichicos», que amasaron importante fortunas a raíz de los negocios que hicieron durante muchos años con el chavismo que actualmente son investigados por las autoridades Federales de Estados Unidos.

Las marcas Hawkers y Northweek son famosas en España por la venta de modernas gafas de sol a precios muy accesibles que van desde los 24 euros y que pese a que desde que trascendió que uno de sus inversionistas era Betancourt, ha continuado creciendo en el mercado juvenil, por los precios accesibles y por los modelos que ofrecen al público.

Sin embargo, hay que recordar que portales periodísticos dedicados a la investigación llegaron a informar que un grupo de «empresarios» venezolanos que habían sido identificados como los «Bolichicos», entre los que mencionaban a Alejandro Betancourt, habrían presuntamente ofrecido sobornos de millones de dólares a gerentes de la compañía petrolera de Venezuela a cambio de que les concedieran contratos para el desarrollo de la infraestructura del sector eléctrico; obras que no llegaron a realizarse y que provocaron el colapso del sistema eléctrico venezolano.

Para estos negocios utilizaban la compañía Derwik Associates, que era la compañía que se encargaba de conseguir los contratos y a través de la cual supuestamente se pagaban los sobornos a los gerentes de la estatal petrolera, por la época de 2009 – 2010. Las filtraciones periodísticas señalaban que un bufete panameño identificado como Alcogal manejaba 14 sociedades en las Islas Vírgenes Británicas y seis fundaciones en Panamá que serían propiedad de Alejandro Betancourt, a través de las cuales se hicieron movimientos de recursos sospechosos, tras los negocios de Derwik Associates con la estatal petrolera de Venezuela.

En España arribó con fuerza en 2012, cuado la compañía que utilizaron para hacer negocios con PDVSA obtuvo en una subasta una finca de caza el Toledo, por la que pagó 24 millones de euros y a partir de allí comenzó a codearse con lo más selecto de las clases pudientes de España. Los fundadores de la start up de moda llegaron a declarar a periodistas que investigaron el ascenso de la marca que Betancourt llegó dispuesto a invertir aproximadamente 40 millones de euros en la compañía.

La empresa Derwik Associates ha sido señalada, por consultores del sector energético venezolano, de haber recibido en apenas 14 meses 12 de los 14 contratos para invertir en el sistema eléctrico nacional, adjudicados por PDVSA, Corpoelec y la Corporación Venezolana de Guayana, en contrataciones que fueron firmadas con sobreprecio de hasta 2 mil millones de dólares.

Pese a todo este escándalo, este «empresario» venezolano ha podido continuar impunemente con su carrera de negocios en España, pero todavía mantiene sus vínculos con el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela y en su página web exhibe una fotografía junto al equipo de la compañía Hawkers, de a cual se presenta como el presidente y mayor accionista y donde además añade que su carrera ha estado dedicada al «emprendimiento», pero en la extensa perorata que exhibe en el currículo de su web no aparece por ninguna parte el nombre de Derwick Associates, a pesar de que si aparece en reiteradas oportunidades que ha hecho negocios con la estatal petrolera venezolana.

«Hawkers es la tercera mayor compañía de gafas de sol a nivel mundial con operaciones en más de 20 países.  Betancourt ha liderado una estrategia de profesionalización y expansión al canal físico. Tras una ambiciosa política de aperturas en los centros más representativos, la marca ha inaugurado más de 60 tiendas a nivel internacional en un tiempo récord», dice la página web del «empresario venezolano» que está instalado en España; país que durante los últimos años se ha convertido en la cuna del chavismo que ha huido del país para instalarse y hacer negocios de los dineros que fueron saqueados de las empresas del Estado, sin que las autoridades españolas hayan hecho mayor caso al tema.