Vox mira con recelo la campaña de «matón de barrio» que ha organizado Ortega Smith

En el partido de Santiago Abascal no todos comparten la idea de Javier Ortega Smith. El candidato Vox en Madrid se ha inspirado en «Desokupa» para lanzar su campaña electoral, el problema es que no está saliendo todo como le gustaría. En su cabeza sonaba muy bien: un candidato paseando por las calles de Madrid «amenazando» a todo aquel que incumpla la legalidad. Los objetivos elegidos por Ortega Smith y sus asesores de campaña son todos esos clichés en torno a los cuales Vox erigió su discurso. Sin embargo, esos paseos de «matón», tal y como lo califican en redes sociales, no parecen estar calando como le gustaría. Primero fueron los okupas y ahora los manteros, pero queda mucha campaña por delante.

Javier Ortega Smith está «resentido» y ha organizado una campaña electoral a su gusto. No es que esté en total rebeldía, pero sí que se siente traicionado por su propia ejecutiva, tal y como cuentan fuentes de Vox. Que le apartaran como secretario general de la formación fue toda una declaración de intenciones por parte de Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros. Le han dejado la candidatura de Madrid, pero que ya no cuenta con la confianza de la cúpula de Vox es una evidencia que nadie discute. Por todo esto, Ortega Smith se siente libre para montar la campaña que quiera en Madrid, pero no parece que guste demasiado el estilo elegido por el candidato.

Pasearse por Madrid amenazando a todos los clichés que han servido para el argumentario de Vox. Ha amenazado a okupas y ahora a manteros. Todo él en persona y dando la cara para darle ese tono de «valentía» que tanto le gusta enseñar a Ortega Smith. El concejal se ha pasado por las calles de Madrid y ha reprendido a manteros, okupas y a algún que otro madrileño que le ha criticado para hacer una serie de vídeos que le den notoriedad, pero lo cierto es que en Vox no ven con buenos ojos ese paseíllo.

Ortega Smith ha cogido su pequeña parcela de libertad y se ha dedicado a utilizar su candidatura sin obedecer demasiado lo que le digan desde la cúpula de Vox. En el partido no están contentos con Ortega Smith y con ese estilo tan agresivo de entender la política. Ya cuando salió con un fusil disparando muchos se quedaron de piedra porque no entendieron a qué vino ese vídeo y a qué vino tomarse determinadas libertades. Acabaron por apartar a Ortega Smith de la secretará general, pero en Madrid sigue teniendo mucho que decir.

HOSTIL CONTRA ALMEIDA

El otro problema que tienen que tener en cuenta es la «hostilidad» con la que Ortega Smith negociará con José Luis Martínez-Almeida si es que se necesitan el uno al otro para gobernar. Lo cierto es que no tienen una buena relación. El alcalde de Madrid «traicionó», a ojos de Ortega Smith, a los votantes conservadores con Madrid Central y el concejal quiere reprochar todo esto al candidato popular en el mismo momento en el que se celebren las elecciones. Desde Vox no lo ven con malos ojos. De hecho, una de las pocas cosas que les convence de Ortega Smith es que precisamente se va a poner firme en este asunto, pues lo que quiere Santiago Abascal es exigir algo más al PP para dar sus votos, como por ejemplo ministerios, consejerías o concejalías.

Entretanto, a Ortega Smith solo le quedaría enfrentarse a algunos menores no acompañados que cumplieran los clichés que tanto han vendido desde Vox para cerrar el círculo de campaña electoral que ha planteado el concejal.